La comunidad de Inteligencia de Estados Unidos determinó que el grupo terrorista Estado Islámico del Gran Jorasán podría cometer un atentado en el territorio del país norteamericano en apenas seis meses, mientras que Al Qaeda podría regenerar sus fuerzas para llevar a cabo un ataque fuera de Afganistán dentro de dos años, según reveló el pasado martes un alto funcionario del Pentágono, informa New York Post.
Las declaraciones al respecto demuestran que la retirada de las tropas estadounidenses, marcada por la victoria de los talibanes y atentados efectuados por esa rama del EI, dejaría abiertas las amenazas provenientes del territorio afgano que en un corto período podrían afectar seriamente los intereses de seguridad nacional de Washington.
"Podríamos ver al Estado Islámico del Gran Jorasán regenerar su capacidad en algún momento entre 6 o 12 meses, de acuerdo con estimaciones actuales", aseveró Colin Kahl, subsecretario de Defensa para Política.
El funcionario precisó que Washington no pudo evaluar si los talibanes podrían contrarrestar la amenaza de la rama local del EI.
"Nuestra conclusión es que los talibanes y el Estado Islámico del Gran Jorasán son enemigos mortales. Por eso, los talibanes están altamente motivados a perseguir al Estado Islámico del Gran Jorasán. Su capacidad para hacerlo, en mi opinión, ha de determinarse", agregó Kahl, citado por Reuters.
Por otra parte, señaló que la amenaza de Al Qaeda, que podría regenerar sus capacidades dentro de "uno o dos años" para efectuar ataques fuera del territorio de Afganistán contra EE.UU., representa un problema más complejo. Según Kahl, es bastante seguro que ambas organizaciones terroristas "tienen la intención" de realizar atentados de este tipo.
"Debemos permanecer en alerta ante esta posibilidad", afirmó.