El expresidente argentino Mauricio Macri afirmó este lunes que los 45.000 millones de dólares que el Fondo Monetario Internacional (FMI) le prestó a Argentina durante su mandato fueron destinados a "pagarle a los bancos comerciales que se querían ir del país" porque "tenían miedo de que volviera el kirchnerismo".
En una entrevista con CNN en Español, el exmandatario se contradijo respecto a lo que había afirmado anteriormente, cuando señaló que el dinero recibido del préstamo, el más grande de la historia argentina y también del FMI, se usó para pagar "deudas que dejaron ellos", en referencia al anterior Ejecutivo, encabezado por Cristina Fernández de Kirchner.
En medio de las negociaciones que lleva adelante la Administración de Alberto Fernández para abonar los compromisos de deuda que asumió el gobierno de Macri, el líder de Juntos por el Cambio sostuvo: "La plata del FMI, que es la plata de los demás países, la usamos para pagar a los bancos comerciales que se querían ir porque tenían miedo de que volviera el kirchnerismo".
Los dichos del político y empresario fueron interpretados por el oficialismo como una "confesión" que confirma lo que vienen denunciando desde la firma del acuerdo: que el dinero del préstamo se utilizó para solventar la fuga de dólares de una "casta financiera" y para darle un respaldo económico y político a Macri antes de las elecciones presidenciales en las que buscaba la reelección.
La portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti, señaló al respecto: "Macri solo sigue confirmando con sus declaraciones que tomó una deuda irresponsablemente, arbitrariamente, solo para su beneficio político, también para el beneficio económico de sus amigos y del grupo financiero, de alguna manera de la casta financiera. Si hay alguna casta en este mundo más que la casta política, es la casta financiera".
Por su parte, el referente de la centro derecha argentina aseguró además que el expresidente de EE.UU. Donald Trump "se portó muy bien" y "colaboró muchísimo" con su Ejecutivo, entre otras cosas por su apoyo al crédito del FMI solicitado en 2018, un año antes de los comicios.
"En 2015 recibimos un Estado quebrado, en el tercer subsuelo. Prometimos un edificio de 50 pisos. Llegamos a la planta baja, estábamos construyendo el primero, lejos de la expectativa que generamos, por eso no llegamos al 50 % [de los votos]", interpretó Macri sobre su derrota electoral en 2019.
Siguiendo con esa analogía del edificio en construcción, Macri cuestionó el desempeño del Gobierno de Alberto Fernández desde su asunción hasta la actualidad: "Lamentablemente, en estos 20 meses, este ejército de demolición no solo no siguió construyendo el edificio, sino que volvió no al tercer subsuelo, sino al sexto subsuelo".