Ezekiel Ndikumana, pastor de una iglesia en la ciudad de Nashville (Tennessee, EE.UU.), logró prevenir un posible tiroteo al doblegar a un hombre que agitaba un arma en pleno servicio religioso, este domingo, ante decenas de feligreses, reporta The Tennessean. El video con lo sucedido se ha difundido en redes.
De acuerdo con el Departamento de Policía Metropolitana de Nashville, el incidente se produjo cuando el sacerdote terminaba de pronunciar sus oraciones. Al bajar del altar el párroco, el alborotador se levantó de su asiento y se dirigió hacia él. Entonces sacó una pistola y comenzó a apuntar nerviosamente en dirección a los parroquianos.
Rápidamente, Ndikumana se coló por detrás del perturbador, lo atrapó por los brazos y lo tiró al suelo. Varios devotos lo ayudaron entonces a desarmar al hombre y controlarlo hasta la llegada de los policías.
"Estoy muy feliz de haber llegado a él primero, antes de que pudiera disparar y herir a cualquiera de mis feligreses, que son mi familia", dijo el pastor.
Una vez arrestado, el alborotador, identificado por la Policía como Dezire Baganda, aseguró ser Jesucristo y proclamó que "todas las iglesias y escuelas tienen que ser tiroteadas".
Al detenido se le imputan 57 cargos por asalto agravado. Este lunes permanecía entre rejas, sujeto a una fianza de 375.000 dólares.