El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, dijo este lunes a inversores en Dubái que la Amazonía "no se incendia" y los invitó a visitarla.
"Queremos que realmente conozcas Brasil. Un viaje y un recorrido por el Amazonas es algo fantástico, incluso para que veas que nuestro Amazonas, al ser un bosque húmedo, no se incendia", sostuvo el mandatario durante el evento 'Invest in Brasil Forum', en el que participó como parte de su gira por Oriente Medio en busca de inversores, reseñó G1.
Bolsonaro, además, señaló que los "ataques" que recibe Brasil en relación con este patrimonio natural "no son justos".
"Los ataques que sufre Brasil cuando se discute sobre la Amazonía no son justos. Allí se conserva más del 90 % de esa área, es exactamente igual que cuando se descubrió en el 1500. La Amazonía es fantástica", añadió.
Durante el evento, el presidente afirmó que los países árabes "son uno de los socios preferidos" de Brasil y que el país tiene las "puertas abiertas" para los negocios en diferentes áreas, especialmente en la agricultura.
Datos contradictorios
La afirmación hecha por Bolsonaro en el 'Invest in Brasil Forum' dista mucho de los datos ofrecidos por distintas instituciones brasileñas sobre la situación en la Amazonía.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE), en junio pasado hubo el mayor número de brotes de incendios registrados en ese mes en los últimos 14 años en la Amazonía brasileña, con 2.308 puntos de calor.
En julio se registraron 4.977 brotes de incendio y en agosto fueron alrededor de 28.060. En septiembre hubo 16.742 focos, mientras que en octubre llegaron a 11.549.
Según un estudio divulgado en septiembre por MapBiomas Amazonía, entre 1985 y 2020, el Amazonas perdió un 52 % de sus glaciares, localizados en su región andina, y 74,6 millones de hectáreas de su cobertura vegetal natural, un área equivalente al territorio de Chile.
De entre todos los países que cubren la Amazonía —Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Guyana francesa, Perú, Surinam y Venezuela—, el gigante latinoamericano es el que registra mayores pérdidas, con un 19 % de área devastada.