EE.UU. no quiere que la confrontación entre Washington y Pekín se convierta en un conflicto que sería "catastrófico para todos"

Las autoridades estadounidenses seguirán usando la diplomacia para minimizar y disuadir el potencial de un conflicto, afirmó el secretario de Estado, Antony Blinken.

El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, declaró este lunes que Washington no quiere ningún conflicto con Pekín, destacando que las consecuencias de tal conflicto podrían ser catastróficas "para todos".

"El presidente [Joe] Biden dijo al presidente Xi [Jinping] el pasado mes que compartimos una responsabilidad profunda para garantizar que la competición entre nuestros países no vire hacia un conflicto. Nos tomamos esta responsabilidad con la mayor seriedad", afirmó Blinken, y agregó: "El fracaso en hacerlo sería catastrófico para todos nosotros".

"La diplomacia continuará siendo nuestra herramienta de primera instancia para cumplir con esta responsabilidad: garantizando que el potencial de un conflicto en la región sea minimizado, manejado y finalmente disuadido", reiteró.

Las relaciones entre China y EE.UU. han ido empeorando gradualmente desde el mandato de Donald Trump, quien inició una guerra comercial contra el gigante asiático. Tras la llegada al poder de Joe Biden, las tensiones entre los dos países continuaron.

Uno de los motivos de las tensiones son sus respectivas posturas respecto a Taiwán. China considera que la isla forma parte de su territorio y se opone al apoyo militar que EE.UU. presta a la región, mientras que Washington, pese a adoptar la política de una sola China, mantiene amplios vínculos con Taipéi.

Si te ha parecido interesante, ¡compártelo con tus amigos!