La Justicia argentina procesó este miércoles a seis policías de la Ciudad de Buenos Aires con prisión preventiva al considerarlos responsables de intentar encubrir el crimen de Lucas González, el joven futbolista de 17 años que fue asesinado de un disparo en la cabeza en el barrio de Barracas.
En la resolución, a la que tuvo acceso Télam, se ordenó la privación de la libertad de los comisarios Juan Romero y Fabián Alberto Du Santos, el subcomisario Roberto Inca, el inspector Héctor Cuevas y las oficiales Lorena Miño y Micaela Fariña. A ellos se les adjudican los delitos de "falsedad ideológica y encubrimiento agravado en concurso real".
Además, el juez amplió el procesamiento por los malos tratos que habrían recibido los tres amigos de la víctima, que estaban junto al joven cuando ocurrió el homicidio. Así, los efectivos también deben afrontar los cargos de "privación ilegal de la libertad agravada y vejaciones". Por otro lado, el magistrado les dictó un embargo por un millón de pesos (9.800 dólares) a cada uno.
La decisión judicial se produce tras el pedido hecho por el fiscal, luego de que el lunes se ampliaran las declaraciones indagatorias de los acusados. Ese investigador también había denunciado el delito de "imposición de torturas", al señalar que Lucas González fue quemado con un cigarrillo mientras agonizaba, sumado a las agresiones que habrían padecido los otros adolescentes.
Por su parte, el abogado de las familias de las víctimas, Gregorio Dalbón —conocido por representar a la expresidenta Cristina Kirchner en otros casos—, sostuvo que esta resolución es "histórica".
Los hechos
El crimen se produjo en la mañana del 17 de noviembre, cuando González y sus amigos salían de entrenar del club donde jugaban: Barracas Central. Conducían un automóvil Volkswagen Suran, perteneciente al padre de uno de los chicos, y se detuvieron en un kiosco para comprar un jugo.
En ese instante, fueron interceptados por policías de civil. Los efectivos aparecieron en un auto Nissan Tiida, perteneciente a la Brigada de Investigaciones de la Comuna 4, presuntamente, sin ningún tipo de identificación policial ni patente. Así, de forma intempestiva, tres individuos armados bajaron del vehículo y los menores, según su propio relato, creyeron que eran ladrones con intenciones de robo, y huyeron del lugar a bordo del Volkswagen.
Como respuesta, los policías les dispararon desde distintos ángulos, y una de las balas impactó en la cabeza de González, quien murió horas después en el hospital El Cruce, en la jurisdicción de Florencio Varela, Provincia de Buenos Aires. Por este homicidio, ya fueron detenidos los efectivos Juan José Nieva, Fabián López y Gabriel Issasi.
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