El caso de But es otra muestra de la 'hipocresía judicial de EE. UU.'

En el caso de Víktor But EE. UU. mantiene una política judicial hipócrita y recurre a la práctica del doble rasero. Así lo asegura el politólogo Omar José Hassan Fariñas.

“Es muy probable que utilicen a But como un elemento de intercambio en una política de Estado. Se trata de un elemento de presión contra el Gobierno para ver si pueden obtener concesiones  en ciertas áreas de interés para EE. UU., a cambio de una persona que no cometió ningún crimen en primer lugar”, opina el politólogo.

“EE. UU. es uno de los pocos países que no se somete en la Corte Internacional”, prosigue el experto, añadiendo que estamos observando "la misma hipocresía del Gobierno norteamericano", marcada por "toda su historia, llena de dobles estándares", por lo que "el caso del But representa tan solo un elemento más".

Este jueves el tribunal federal de Nueva York ha condenado al empresario ruso Víktor But a 25 años de prisión por tráfico de armas. La juez también ordenó la confiscación de 15 millones de dólares.

El empresario fue encarcelado en Tailandia en 2008 tras un encuentro con agentes de EE. UU., que se hicieron pasar por integrantes de la guerrilla colombiana de las FARC. Entonces en Tailandia consideraron insuficientes las pruebas presentadas por la parte norteamericana y se negaron a cumplir la solicitud de extradición.

No obstante, la presión por parte de EE. UU. y la multitud de acusaciones contra el negociante ruso tuvieron su efecto. El 20 de agosto del 2010 un tribunal tailandés sancionó la entrega del empresario a la justicia estadounidense.