La semana pasada la Policía israelí detuvo durante una patrulla rutinaria un vehículo sospechoso que iba en sentido contrario por una calle de sentido único en Jerusalén. Durante el registro en el maletero del coche los agentes encontraron una caja con raros objetos arqueológicos de bronce.
La Autoridad de Antigüedades de Israel comunicó este miércoles que los objetos descubiertos, entre ellos cientos de monedas del Imperio romano tardío, incensarios ornamentales y una jarra de bronce, tienen 2.000 años de antigüedad.
Los arqueólogos creen que los objetos probablemente fueron incautados durante la rebelión de Bar Kojba, una revuelta judía contra el dominio romano en el siglo II d. C., informa The Times of Israel.
Se cree que los objetos fueron robados del lugar donde habían sido ocultados deliberadamente o de un complejo donde se escondía la población tras las batallas durante la rebelión de Bar Kojba, y que los ocupantes del automóvil los estaban llevando a Jerusalén para venderlos a un comerciante de antigüedades.
"Estos hallazgos antiguos encarnan la historia del país, pero para los ladrones y comerciantes son simplemente cosas vendidas al mejor precio por pura codicia", comenta Eli Eskozido, director de la Autoridad de Antigüedades. "Es extremadamente importante prevenir cualquier intento de participar en el tráfico ilícito de antigüedades, recuperar hallazgos valiosos y devolverlos al público y al país".
Las autoridades han abierto una investigación penal contra los tres sospechosos que fueron encontrados con los objetos.