Una chimpancé criada por los humanos fue golpeada hasta la muerte por otros primates en un santuario en Kenia a donde había sido llevada para que aprendiera a vivir con otros animales de su especie, según comunicaron desde la instalación el pasado 17 de diciembre.
Baran, de cuatro años, fue enviada en julio de este año al Sweetwaters Chimpanzee Sanctuary de Ol Pejeta Conservancy desde el zoo Eram de Irán y, tras pasar con éxito una cuarentena de 90 días, fue trasladada a la sección principal para someterse a una primera fase de integración.
En esta fase, Baran pudo observar de lejos a otros primates, con los que no podía entrar en contacto físico. "Esta fase es importante para que se familiaricen hasta que se forme un vínculo para poder pasar a otra fase de integración", explicaron desde el santuario en su cuenta de Twitter.
Sin embargo, Baran logró atravesar la zona que la separaba de otros animales donde se encontró con los chimpancés que la golpearon. La joven chimpancé murió a causa de sus heridas tras la pelea. "Los cuidadores intervinieron rápidamente para frenar la agresión, pero en tan poco tiempo Baran ya había sufrido heridas graves y necesitaba una intervención médica urgente", escriben.
"Estamos profundamente entristecidos por la pérdida de Baran, que debía convertirse en un miembro joven de una familia más grande de 34 chimpancés que viven en el santuario", reza el mensaje del santuario, donde a lo largo de los años se han integrados con éxito 22 chimpancés.