Bennett Kaspar-Williams, un hombre trans de EE.UU. que dio a luz a un bebé el año pasado relató la experiencia de su transformación corporal y se quejó de que las enfermeras que lo atendían durante su embarazo insistieron en llamarlo "mamá".
Tras conocer a Malik en 2017, con quien se casó en 2019, la pareja decidió tener un hijo y sopesaron las opciones disponibles, ya que esto significaba que Bennett tendría que detener su tratamiento hormonal para adquirir características masculinas, que había estado recibiendo durante varios años.
Bennett, de 37 años, quien fue operado en la mitad superior de su cuerpo, pero no en los genitales, finalmente decidió intentar y, poco después, inició el proceso de gestación de forma natural. "Siempre supe que existía la posibilidad de que mi cuerpo lograra el embarazo, pero no era algo que quisiera hacer hasta que aprendí a separar la función de mi cuerpo de cualquier noción de género", confesó el hombre en una conversación con DailyMail.
En octubre de 2020, Bennett dio a luz a su hijo Hudson mediante cesárea. Sin embargo, mientras estaba en el hospital, el personal médico desconocía su género, llamándolo "mamá". "Incluso con una barba completa, un pecho plano y un marcador de género masculino en toda mi identificación, la gente no podía evitar llamarme 'mamá', 'madre' o 'señora'", relató, agregando además que "nada de estar embarazado" le pareció "femenino".
"Es tan importante que dejemos de definir la 'feminidad' en términos de 'maternidad', porque es una falsa equivalencia que todas las mujeres puedan ser madres, que todas las madres lleven a sus hijos o que todas las personas que llevan hijos sean madres", aseveró Bennett.