Lia Thomas, la nadadora transgénero que ha levantado polémica por la enorme cantidad de récords que ha batido desde que empezó a competir en la categoría femenina, fue vencida en dos eventos por Iszac Henig, una nadadora en proceso de transición de mujer a hombre.
Ambas deportistas se enfrentaron el pasado sábado en la conferencia deportiva Ivy League de la Asociación Nacional Deportiva Universitaria (NCAA, por sus siglas inglés) de EE.UU. en Filadelfia. Thomas, de la Universidad de Pensilvania, y Hening, representando a la Universidad de Yale, se midieron en los 100 y 400 yardas libres femeninos, donde esta última salió victoriosa. Además, estableció un récord en los 50 yardas de la misma categoría. No obstante, Lia logró victorias en los 200 y 500 yardas libres.
Hening, de 20 años, se declaró públicamente un hombre transgénero a mediados del año pasado y se sometió a una cirugía superior para la afirmación de género con la que modificó su pecho para lograr un aspecto masculino. No obstante, retrasó el inicio de su tratamiento con testosterona con el propósito de continuar haciendo parte del equipo femenino de Yale, lo que le permitió competir el pasado fin de semana. Según las regulaciones de la NCAA, la terapia de reemplazo hormonal se lo habría impedido.
"Como atleta estudiantil, salir del armario como un chico trans me puso en una posición extraña. Podría comenzar con las hormonas para alinearme más conmigo mismo, o esperar, hacer la transición social y seguir compitiendo en un equipo de natación femenino. Me decidí por lo último", dijo Iszac en una entrevista en junio para el The New York Times.
El caso de Hening ha vuelto a poner sobre la mesa el debate de la ventaja competitiva de los deportistas transexuales, que ya había sido noticia el mes pasado por las varias plusmarcas de Thomas, quien había competido antes de transicionar durante tres años.
Con los resultados de esta última competencia, los padres de algunas nadadoras reiteraron su descontento por la participación de deportistas transgénero e hicieron un nuevo llamado a la NCAA para tomar medidas. "Un hombre acaba de aplastar al equipo femenino", se quejó uno de ellos hablando con el diario Daily Mail.
La polémica generada hace semanas por Thomas incluso llevó a que un grupo de padres de algunas integrantes del equipo femenino de natación de la Universidad de Pensilvania redactaran una petición para cambiar las reglas que permiten a mujeres trans competir en certámenes femeninos.
De acuerdo con el diario británico, la semana pasada varias compañeras de equipo de Thomas habían considerado boicotear el evento del sábado por su participación, pero estaban preocupadas por ser etiquetadas como transfóbicas y terminar expulsados del campeonato de la Ivy League en febrero. Entre tanto, el jueves pasado la Universidad de Pensilvania y la Ivy League reafirmaron públicamente su apoyo a Thomas, señalando que ha respetado los lineamientos de la NCAA y, por ende, "continuará representando al equipo femenino de natación en competición esta temporada".