Las autoridades venezolanas denunciaron este miércoles que se registró un nuevo "sabotaje criminal" contra las instalaciones de la industria petrolera del país.
Se trata de una explosión en el Poliducto de Oriente —desde el cual se distribuye todo el combustible hacia los estados orientales del país—, ubicado en Naricual, municipio Simón Bolívar del estado de Anzoátegui, que dejó varias personas heridas.
La Comisión Presidencial Alí Rodríguez Araque, conformada para la defensa, reestructuración y reorganización de la industria petrolera, señaló que esta acción fue "provocada".
"Esta acción criminal forma parte de la guerra permanente dirigida por grupos pertenecientes a la extrema derecha venezolana que, amparados por el imperialismo norteamericano, buscan atentar y boicotear los importantes avances que el Gobierno Bolivariano ha conseguido dentro del nuevo sistema de producción, distribución y comercialización de combustibles en todo el país", dice la comisión en un comunicado.
Añade que este hecho se suma "al expediente criminal de sanciones y amenazas" de las que ha sido objeto la industria petrolera venezolana durante los últimos 5 años, por parte de "sectores oposicionistas y extremistas", que buscan interrumpir todas las operaciones asociadas a Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA).
La comisión informa que, una vez ocurrido el siniestro, se activaron los equipos de PDVSA "para activar los protocolos de contingencia respectivos" y "adoptar todas las medidas necesarias" para garantizar "la restitución operacional de la infraestructura atacada" y así evitar la interrupción del servicio de distribución de combustible.
Tres heridos
La noche del martes, Protección Civil informó sobre la explosión y señaló que hubo tres personas heridas, aunque no brindó mayor detalle al respecto.
La institución señaló que se dirigieron a la zona, junto a bomberos y el personal de PDVSA. Asimismo, indicaron que comunidades aledañas al lugar del siniestro fueron desalojadas de manera preventiva.