Las tensiones actuales en la frontera ruso-ucraniana son excesivas, por lo que Moscú insiste en una respuesta concreta por parte de Washington a sus propuestas sobre garantías de seguridad, según declaró este sábado Dmitri Peskov, el portavoz presidencial ruso.
"Tenemos demasiada tensión en la frontera. Tenemos demasiada tensión en esta parte de Europa", declaró en una entrevista a la CNN, señalando que esa situación conlleva "más problemas", lo que "es extremadamente peligroso" para todo el continente. "Por eso insistimos en obtener una respuesta directa a nuestras preocupaciones, una respuesta muy concreta a nuestras propuestas muy claras", subrayó Peskov, agregando que "es el único camino para la distensión en la situación actual".
"Vivimos en un mundo de acusaciones falsas"
Además, Peskov comentó los recientes reportes difundidos por medios occidentales que le atribuyen a Rusia la preparación de una supuesta provocación en el país vecino. Aseguró que Moscú no realiza acciones así contra Kiev y añadió que las autoridades estadounidenses no aportaron pruebas de sus acusaciones.
"Escuchamos [...] una declaración del señor Sullivan, que prometió publicar las pruebas de estas acusaciones en 24 horas, si no me equivoco. Todavía estamos esperando esas pruebas", detalló el vocero, refiriéndose a las afirmaciones del consejero de Seguridad Nacional de EE.UU., Jake Sullivan, quien dijo este jueves que "Rusia está sentando las bases para tener la opción de fabricar un pretexto para una invasión" en Ucrania.
Peskov apuntó que "vivimos en un mundo de acusaciones y noticias falsas, un mundo de mentiras" y "mientras no se demuestre con algo visible o algo evidente", Moscú seguirá creyendo que "se trata de noticias falsas y de acusaciones falsas".
El vocero señaló que Moscú y Washington se encuentran "en caminos completamente diferentes", hecho que genera un motivo de preocupación. "Hay cierto entendimiento entre nosotros. Pero en general, en principio, ahora podemos decir que permanecemos en caminos diferentes, caminos completamente diferentes. Y esto no es bueno, es preocupante", comunicó.
En sus declaraciones, Peskov enfatizó la necesidad de que Rusia obtenga garantías jurídicamente obligatorias de que Ucrania no pasará a ser un miembro de la OTAN, porque de lo contrario Kiev dispondrá de la oportunidad legal de unirse a la alianza.
"Estamos acostumbrados a que la parte ucraniana culpe a Rusia de todo"
Asimismo, subrayó que Rusia "no tiene nada que ver con los ataques cibernéticos" contra varias páginas web del Gobierno de la nación vecina. Esto en respuesta a que este viernes, Oleg Nikolenko, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania, informó de "un ataque masivo de piratas informáticos" y agregó que los sitios web de la Cancillería y otras agencias gubernamentales estaban "temporalmente fuera de servicio".
El Ministerio de Cultura y de la Política de Información de Ucrania afirmó que "de acuerdo con un estudio del Centro de Comunicaciones Estratégicas y Seguridad de la Información, las primeras conclusiones sugieren que el ataque fue realizado por Rusia".
"Vimos estos mensajes. No tenemos nada que ver con eso. Rusia no tiene nada que ver con estos ataques cibernéticos", afirmó Peskov. "Hemos oído acusaciones contra Rusia de que Rusia está detrás de esto. Pero no se han aportado pruebas. [...] Estamos acostumbrados a que la parte ucraniana culpe a Rusia de todo, incluso del mal tiempo en su país", subrayó.
- La postura rusa sobre los asuntos de seguridad fue presentada el pasado 17 de diciembre, cuando Moscú publicó dos propuestas de acuerdos que quiere alcanzar con EE.UU. y la OTAN. Sus puntos clave prevén excluir la expansión de la OTAN hacia el este, no admitir en esa alianza militar a Estados que fueron miembros de la URSS y no desplegar fuerzas de ataque cerca de las fronteras rusas
- Este 10 de enero tuvieron lugar en Ginebra (Suiza) negociaciones entre las delegaciones rusa y estadounidense, unas conversaciones que duraron ocho horas. El 12 de enero se celebró la reunión del Consejo Rusia-OTAN en la capital belga, Bruselas, y el día siguiente se llevó a cabo la última ronda de diálogos en Viena (Austria) en el marco de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE)