Dos tercios de los efectos secundarios a la vacuna contra el covid-19 son causados por una versión negativa del efecto placebo, según un estudio
Un grupo de investigadores ha concluido que más de dos tercios de los efectos secundarios habituales que experimentan las personas después de inocularse contra el coronavirus pueden atribuirse a una versión negativa del efecto placebo y no a la propia vacuna.
Los resultados del estudio, publicado este martes en la revista Jama Network, mostraron que el denominado efecto nocebo, conjunto de efectos adversos sobre la salud que se produce por la expectativa de reacciones negativas, representó alrededor del 76 % de todas las reacciones adversas comunes después de la primera dosis y casi el 52 % después de la segunda.
Los científicos analizaron a 22.578 receptores del placebo y 22.802 receptores de la vacuna. Tras recibir la primera dosis, el 35,2 % de los receptores del placebo experimentaron efectos secundarios, siendo los más frecuentes el dolor de cabeza y la fatiga. Después de la segunda dosis, un 31,8 % notificó reacciones adversas.
En comparación, el 46 % de los receptores de la vacuna experimentaron efectos secundarios tras inyectarse con la primera dosis, porcentaje que se elevó al 61,4 % tras recibir la segunda.
Así, aunque se registraron significativamente más reacciones adversas en el grupo de vacunados en comparación con el grupo de placebo, las tasas de efectos secundarios notificadas entre estos últimos siguen siendo considerablemente altas.
"Dado el gran número de personas que han recibido o recibirán la vacuna contra el covid-19, los resultados de este estudio son importantes para la población general en todo el mundo", señala el estudio. Asimismo, los científicos destacaron que "informar a la población sobre la posibilidad de que se produzcan respuestas nocebo puede ayudar a reducir la preocupación por la vacunación contra el coronavirus, lo que podría disminuir las dudas sobre la inoculación".
Ted Kaptchuk, uno de los autores del estudio, indicó a The Guardian que informar a los pacientes de que a menudo los efectos secundarios de la vacunación se deben al efecto nocebo "reduce la ansiedad". "Pero necesitamos más investigación", agregó el científico.