Analizar los ojos en profundidad puede proporcionar un método eficaz de determinar la edad biológica de una persona e incluso pronosticar su muerte, según un nuevo estudio.
Un grupo de investigadores chinos ha elaborado un algoritmo de predicción de la posibilidad de fallecimiento prematuro basado en el escaneo de la retina humana, tejido sensible a la luz ubicado en la superficie interior del ojo.
Usando tecnología de aprendizaje automático, los científicos estudiaron más de 80.000 imágenes de retinas de casi 47.000 personas y determinaron la correlación entre la edad cronológica y la biológica de los participantes. Una década después de que se tomaran las imágenes, 1.871 de los participantes fallecieron y aquellos cuyas retinas mostraban una edad más avanzada que la de la persona resultaron ser propensos a pertenecer a este grupo.
Por ejemplo, si el algoritmo mostraba que la retina era un año mayor que la edad real de la persona, la probabilidad de muerte por cualquier causa en los próximos once años subía un 2 %, y por causas no cardiovasculares ni asociadas con cánceres, en un 3 %.
Según el estudio, publicado en la revista British Journal of Ophthalmology, los hallazgos son puramente de índole observacional y todavía no han sido establecidos los factores que definen esta relación a nivel biológico.
Se precisa que el 55 % de las muertes entre los participantes se debieron a cánceres, un 17 % a enfermedades cardiovasculares y los restantes murieron por otras causas.
La proporción de las participantes que tenían una diferencia de 3, 5 y 10 años entre la edad de la retina y la edad real se situó en el 51 %, 28 % y 4,5 %, respectivamente.