En el marco de la reunión del Buró Político del Comité Central del Partido de los Trabajadores de Corea, celebrada este miércoles y presidida por Kim Jong-un, Pionyang habría ordenado poner fin a la suspensión de las pruebas de armas nucleares y de misiles balísticos intercontinentales (ICBM, por sus siglas en inglés), reporta la agencia surcoreana Yonhap.
Mientras, el periódico estatal norcoreano Rodong Sinmun dio a conocer este miércoles que el Politburó ordenó reforzar su defensa contra "los pasos hostiles de EE.UU." dirigidos contra Corea del Norte "que cada día se vuelven más serios" con la intención de prepararse a una "confrontación a largo plazo con el imperialismo" de Washington.
"Todos los hechos vuelven a demostrar claramente que la política hostil hacia la República Popular Democrática de Corea también existirá en el futuro, mientras exista la entidad hostil del imperialismo de EE.UU.", escribe Rodong Sinmun.
En este contexto, el Politburó dio instrucciones para reconsiderar las medidas del "fomento de la confianza" y evaluar la reanudación de todas las actividades temporalmente suspendidas" en una posible referencia a su moratoria a pruebas de armas nucleares y de misiles balísticos intercontinentales.
Pruebas de misiles
Corea del Norte no lleva a cabo pruebas de armas nucleares o ICBM desde finales de 2017 bajo la moratoria autoimpuesta, aunque realiza ejercicios de lanzamientos de otros tipos de misiles. En lo que va del año, Pionyang realizó cuatro pruebas al respecto, entre ellos misiles hipersónicos lanzados el pasado 5 y 11 de enero. Además, el pasado 14 de enero el país asiático probó dos misiles balísticos lanzados desde un tren, mientras que este lunes Corea del Norte realizó nuevas pruebas de misiles tácticos.
Entretanto, frente a las recientes ejercicios de lanzamiento realizados por el país asiático, Washington impuso la semana pasada nuevas sanciones que provocaron fuertes críticas desde Pionyang. Corea del Norte advirtió que tendrá que reaccionar "con más fuerza y seguridad" si Estados Unidos adopta esa "postura de confrontación".
"Sensación de tensión"
Por su parte, desde Seúl aseguraron que monitorean de cerca las últimas acciones de Pionyang "con una sensación de tensión", informa Yonhap. "Nos prepararemos bien para un posible deterioro de la situación mientras coordinamos con otros países para mantener la situación en la península de Corea bajo control estable", reza el comunicado del Ministerio de Unificación surcoreano.
"Creemos que el diálogo y la diplomacia son la única solución para avanzar hacia un futuro pacífico", agregaron.