La Iglesia católica española reconoce que puso a su nombre un millar de inmuebles que no son suyos

La Iglesia católica española ha admitido que casi un millar de inmuebles de los 34.961 que inmatriculó entre 1998 y 2015 no son suyos, aunque esta cifra podría ser mayor. La información, dada a conocer este lunes, es fruto del trabajo de la comisión creada para esta cuestión entre el Gobierno de España y la Conferencia Episcopal.

En un encuentro entre el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el máximo responsable de la Iglesia española, el cardenal Juan José Omella, se ha sellado el acuerdo por el que la organización religiosa se compromete a facilitar la devolución de esos casi mil inmuebles a sus propietarios.

En un comunicado conjunto, la Conferencia Episcopal constata que un minucioso análisis "ha revelado un conjunto de bienes que la Iglesia considera que pertenecen a un tercero o no le consta su titularidad sobre el mismo".

Las propiedades se hallan repartidas por toda España, aunque casi la mitad de las 965 que la Iglesia reconoce que no son suyas se encuentran en la Comunidad Autónoma de Castilla y León (485), seguida de Cataluña (101).

Entre los inmuebles afectados hay 98 viviendas, 38 cementerios, 502 terrenos rústicos y 151 urbanos. Además, 208 no pertenecen a la Iglesia, aunque no se sabe de quién es la titularidad; mientras que 757 pertenecen a otro propietario.

El listado elaborado por la Conferencia Episcopal será remitido a la Federación Española de Municipios y Provincias y posteriormente a las entidades locales, que serán las encargadas de la identificación de los titulares.

¿Qué son las inmatriculaciones?

En 1998, un decreto del Gobierno liderado por José María Aznar –del conservador Partido Popular– facilitó la inmatriculación de bienes por parte de la Iglesia católica; es decir, poner propiedades a su nombre a través de un procedimiento para el cual solo era necesaria una certificación eclesiástica.

Claves de la polémica por el listado de los bienes inmatriculados por la Iglesia católica en España

Así, entre 1998 y 2015, según las cifras que manejan las autoridades, la institución religiosa inmatriculó 34.961 bienes. Durante todo ese tiempo diferentes organizaciones han clamado por su devolución. Uno de los casos más conocidos es el de la Mezquita de Córdoba y una de sus plazas aledañas.

Desde 2017 esta cuestión tomó relevancia en la política española, cuando se aprobó una iniciativa en el Congreso de los Diputados que instaba al Gobierno a elaborar un listado con estos bienes. Sin embargo, no fue hasta la moción de censura de 2018, que llevó a Pedro Sánchez a la Presidencia del Ejecutivo, cuando comenzaron los trabajos.

El listado elaborado ahora por la Conferencia Episcopal proviene del análisis exclusivo de 14.947 inmatriculados que no eran lugares de culto, dejando para un estudio posterior estos últimos, entre los que se encontraría el monumento cordobés.

Los trabajos todavía continuarán. Así, el Gobierno ya ha detectado otros 73 bienes, además de estos 965, que requieren un mayor grado de estudio.