El papa Francisco señaló este miércoles que sufre una inflamación del ligamento de su rodilla derecha que le causa dolor al desplazarse, recoge AFP.
La agencia informa que, debido a la dolencia, el pontífice solo saludó desde la distancia a los presentes en su última audiencia general y no bajó del estrado para pasear entre los fieles como suele hacer cada miércoles.