Repsol puede enfrentar multas de más de 4,5 millones de dólares si no cumple con las medidas de Perú para limpiar el derrame de crudo en sus costas
La petrolera española Repsol tendría que pagar hasta 18 millones de soles (4,6 millones de dólares) en multas si incumple una serie de tareas impuestas por las autoridades peruanas para limpiar el derrame de crudo ocurrido en la costa del país.
Este miércoles, en una rueda de prensa, la presidenta del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), Miriam Alegría, comunicó que ya se inició el requerimiento para la imposición de la multa coercitiva, debido a que la petrolera "no ha cumplido con la primera medida impuesta", que consistía en "la identificación de las zonas afectadas, la contención y recuperación del hidrocarburo" derramado.
Alegría también indicó que el 26 de enero terminaba el plazo del segundo bloque de medidas, dispuesto a "efecto de realizar la conservación, custodia y rescate de la fauna que ha sido afectada en las áreas naturales protegidas".
El valor total de las multas
Este jueves se realizará "la verificación de campo, y si identificamos que la empresa no ha cumplido, iniciaremos también el requerimiento para imponer la multa coercitiva", agregó. Además, la presidenta del OEFA aclaró que "las multas van hasta 4.000 Unidades Impositivas Tributarias, que equivalen hasta 18 millones de soles (cerca de 4,6 millones de dólares)".
El jefe del Estado Mayor de la Comandancia de Operaciones de Guardacostas de la Marina del Perú, Jesús Menacho, confirmó este miércoles un segundo derrame de petróleo en las costas del distrito peruano de Ventanilla, afectadas el pasado 15 de enero por el vertido de unos 6.000 barriles del combustible.
Por su parte, Repsol asegura que está "colaborando estrechamente" con la sociedad civil y las autoridades peruanas "para avanzar lo más rápidamente posible en la remediación de las áreas afectadas por el derrame de petróleo". Además, la petrolera negó que se haya producido un nuevo vertido de crudo en el mar del Callao, e indicó que se trataba de un "afloramiento controlado de remanentes" del anterior derrame.