El gobernador de la provincia oriental tailandesa de Rayong, Channa Iamsaeng, ha declarado este sábado el estado de emergencia en la zona costera de la playa de Mae Ramphueng por el derrame de entre 20 y 50 toneladas de petróleo en el golfo de Tailandia, prohibiendo cualquier actividad turística en el lugar, informa AP.
El vertido, ocurrido este martes, fue provocado por una fuga en una manguera submarina operada por la empresa tailandesa Star Petroleum Refining Co., que se empleaba para cargar buques cisterna en un punto de amarre en alta mar.
La compañía petrolera confirmó que la fuga se detuvo en cuestión de horas, sin embargo, en la mañana del sábado, la mancha de petróleo empezó a permearse en la citada playa, lo que provocó el cierre de restaurantes y tiendas que se encuentran ubicadas en la región.
Alrededor de 200 marinos de la Armada Real Tailandesa, así como 150 trabajadores de Star Petroleum, realizaron las tareas de limpieza correspondientes, mediante la utilización de equipos destinados a la absorción y desnatado del petróleo, así como el uso de retroexcavadoras.
Actualmente, como parte de las medidas de saneamiento, se están utilizando aeronaves, las cuales arrojan químicos para la dispersión del petróleo, además de emplear barreras flotantes.
Este desastre ecológico viene afectar económicamente a la industria turística de la región, la cual ha estado sufriendo las medidas restrictivas provocadas por la pandemia de coronavirus, reduciendo el flujo de visitantes a la zona. Las actividades pesqueras también se han visto afectadas por la contaminación marítima.
Existe cierta preocupación de que la mancha de petróleo restante en el golfo de Tailandia pueda afectar a la isla turista de Koh Samet, ubicada en la provincia de Rayong.