El premier de Perú pide el voto de confianza pero el Congreso se niega a sesionar y denuncia al Ejecutivo de querer cerrar el Parlamento

Héctor Valer, acusado por un caso de violencia contra su hija y su esposa, había dicho que el gobierno podría cerrar el Parlamento de no obtener el aval del nuevo gabinete.

El primer ministro de Perú, Héctor Valer, ha solicitado este viernes al Congreso el voto de confianza que avale al nuevo gabinete, reestructurado la semana pasada por el presidente Pedro Castillo, con el objetivo de aminorar los cuestionamientos de la oposición. 

La intención de Valer era que los legisladores sesionaran este sábado, exclusivamente para este tema. Sin embargo, la titular del Parlamento, María del Carmen Alva, rechazó la solicitud y acusó al Poder Ejecutivo de querer disolver el Congreso, un recurso legal que tiene el presidente si se le niega el voto de confianza en dos oportunidades. 

Valer había advertido el jueves lo que podría ocurrir en caso de encontrarse con un rechazo: "Si a nosotros no nos dieran el voto de confianza (...) nos iremos, se reestructurará el Gabinete y habrán perdido la primera bala de plata, que es lo que buscan los otros congresistas, para luego el presidente utilizar la bala de oro, que es la disolución del Congreso, porque puede interponer una nueva moción de confianza", dijo.

Aumenta la tensión

Tomando esas declaraciones en cuenta, la congresista Alva brindó una conferencia de prensa este viernes desde las inmediaciones del palacio legislativo, en la que endureció su discurso contra el gobierno, aumentando el clima de tensión entre ambos poderes. 

"Exigimos desde el Congreso que el presidente (Pedro Castillo) deslinde de estas declaraciones. Queremos saber si esto es realmente lo que quiere el Poder Ejecutivo: amenazar al Congreso de esta manera para que nosotros votemos en contra de esta confianza,nombrando a este premier que no es el idóneo", manifestó.

Y añadió: "Aquí en el Congreso estamos los 130 congresistas que vamos a defender nuestro Parlamento, como lo hemos dicho innumerables veces, hasta con la vida, si fuera necesario. No vamos a permitir que la democracia se interrumpa. Sin Congreso no hay democracia. El presidente Castillo dijo en una entrevista que no tiene pensado cerrar el Congreso. No queremos un presidente mentiroso". 

A continuación, se dirigió a la población peruana para esgrimir que son los congresistas los que van a "dar tranquilidad al país". "Somos los que vamos a luchar por la democracia, porque no queremos un gobierno comunista", dijo, y esperó en silencio un aplauso que no llegaba, hasta que acotó: "Gracias".

Por último, en relación a la sesión para tratar el voto de confianza, María del Carmen Alva aseguró que Valer no siguió el procedimiento adecuado, ya que se debió haber hecho mediante una coordinación y un acuerdo entre el Ejecutivo y el Congreso. Próximamente, aclaró, fijarán la fecha de la presentación del Gabinete Ministerial. 

Un primer ministro acusado por violencia familiar

Valer es el nuevo blanco de las bancadas de derecha en el Parlamento, ya que lo acusan por un caso de violencia familiar que data de 2016, cuando su esposa, ya fallecida, y su hija, se presentaron ante una dependencia policial para denunciar agresiones físicas recibidas por parte del abogado y dirigente político.

El flamante presidente del Gabinete de Ministros reconoció haber protagonizado una disputa familiar, pero negó haber dado "bofetadas, puñetes, patadas en el rostro y diferentes partes del cuerpo, además de jalones de cabello" a su hija, como figura en un documento al que presuntamente tuvo acceso el periódico La República

Mientras las críticas a su designación aumentan — incluso el ministro de Turismo Roberto Sánchez se refirió a la gravedad de la acusación y pidió que diera un paso al costado—, Valer aseguró que no renunciaría a menos que el mandatario Castillo se lo pidiera.