El expresidente y candidato del Partido Liberación Nacional (PLN), José María Figueres, está liderando con el 27,28 % el conteo de los votos para alcanzar la Presidencia de Costa Rica, según el reporte del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), con el 87,69 % de las mesas escrutadas.
Rodrigo Chaves, del Partido Progreso Social Democrático (PSD), ocupa el segundo lugar con el 16,72 %. Por su parte, Fabricio Alvarado, del Partido Nueva República (PNR), cuenta con el 14,79 % de los votos.
Así, ninguno de los 25 candidatos presentados obtiene más del 40 % de los votos necesarios para ganar en primera vuelta, por lo que los dos aspirantes más votados, hasta ahora Figueres y Chaves, irán a balotaje el próximo 3 de abril.
Una cara conocida y una sorpresa
Figueres, de 67 años, es hijo del fundador del PNL y jefe de Estado en tres ocasiones, José Figueres Ferrer, recordado por haber abolido el Ejército en 1948 tras ganar la guerra civil. Siguiendo la tradición familiar, luego de graduarse en Ingeniería Industrial en la Academia Militar de EE.UU., el actual postulante llegó a la política en 1988, siendo ministro de Comercio Exterior y de Agricultura y Ganadería. En 1991, obtuvo una maestría en Administración Pública en la Universidad de Harvard.
Durante su primer y único mandato como presidente, entre 1994 y 1998, se caracterizó el despliegue del ecoturismo y la llegada de la firma Intel al país. Después, estuvo involucrado en un escándalo de presunto tráfico de influencias por brindar una asesoría a Alcatel entre el 2000 y 2003, recibiendo 900.000 dólares. Figueres sostuvo que el pago fue lícito, y se fue a vivir a Suiza hasta el 2011. En 2007, la Fiscalía había determinado que no cometió ningún delito.
Ahora, el candidato de centroizquierda se propone regresar al Ejecutivo destacando el deterioro económico de la población, señalando que la votación es "un paso para empezar el rescate y la transformación". Al emitir su voto en el pueblo de La Lucha, al sudoeste de San José, expresó: "Este país tiene un millón y medio de personas viviendo en pobreza y medio millón en pobreza extrema. Esas cosas nunca las habíamos vivido en esa magnitud". Según el último Reporte Mundial de la Felicidad, Costa Rica lidera el ranking de las naciones de América Latina entre 2018 y 2020, aunque el contexto empeoró por la pandemia.
Por otro lado, Figueres dijo que si vuelve al Gobierno el respeto por la igualdad será fundamental: "Volveremos a tener Gobierno, con dignidad para las mujeres. No se ocultarán con juegos de palabras el irrespeto a la integridad de las mujeres", añadió. De esta forma, el exmandatario aludió a su rival más directo, Chaves, quien recibió acusaciones de acoso sexual durante su paso por el Banco Mundial, entre 2008 y 2013.
Por su parte, el líder del PSD, quien es visto como la revelación de la elección, ya destaca que su partido, "el más joven de esta campaña", llegará a la segunda vuelta. A su vez, propuso "dejar atrás el conflicto y la confrontación estéril". Chaves, de 60 años, quien se define como un economista de centro, no figuraba entre los tres candidatos más populares en las encuestas previas a la votación, caracterizada por el alto número de indecisos.
Igualmente, ya había ocupado un cargo en la administración pública en el 2020, cuando fue ministro de Hacienda. Su gestión en aquella cartera fue corta, porque el actual jefe de Estado, Carlos Alvarado, le pidió la renuncia por tener "diferencias irreconciliables". La salida se dio luego de la polémica por diversas declaraciones públicas hechas por Chaves, que iban en disonancia con Presidencia. En cuanto a su recorrido académico, realizó un doctorado en Economía de la Universidad Estatal de Ohio (EE.UU.), e hizo un doctorado en el Instituto de Desarrollo Internacional de la Universidad de Harvard.
Abstención histórica
Costa Rica celebró comicios generales el domingo para elegir al nuevo presidente, dos vicepresidentes y a los 57 diputados de la Asamblea Legislativa.
De acuerdo con el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) del país centroamericano, donde habitan más de 5 millones de personas, el padrón electoral es de 3.541.908 ciudadanos, de los cuales 126.525 son nuevos electores.
El TSE informó, además, que se habilitaron 6.847 juntas para que los votantes acudieran a sufragar, entre las 6:00 de la mañana y las 06:00 de la tarde (hora local).
La participación en la jornada electoral rondó el 60 %. Por lo tanto, se trata de la mayor tasa de abstencionismo registrada en Costa Rica desde la fundación de la Segunda República, en 1948. En ese entonces, el récord fue del 35,3 %. Sin embargo, el nivel de la no asistencia no ha caído por debajo del 30 % a partir de 1998, indica el diario Delfino. En el 2018, fue del 34,3 %.
Además, hasta los últimos sondeos que se publicaron antes de la veda electoral, los indecisos estaban a la cabeza de las encuestas, con más de 30 % que aún no había definido por quien votar.
Por su parte, la investigadora de CELAG, Nery Chaves García, destaca que a pesar de que hay tantos candidatos, no hay variedad política y solo dos se pueden identificar como una alternativa al sistema económico neoliberal.
Con estos comicios, Costa Rica abre la agenda electoral de 2022 en América Latina, donde Colombia y Brasil también tienen previsto elegir a su nuevo presidente en los próximos meses.