Un grupo de investigadores encabezado por el geógrafo de la Universidad de California en Los Ángeles (EE.UU.), Park Williams, calificaron la sequía que azota el suroeste de Norteamérica durante los últimos 22 años como la "megasequía" más grave de la región desde al menos el año 800.
Debido a las altas temperaturas y escasas precipitaciones desde el verano de 2020 hasta el del año pasado, la sequía actual superó la intensidad de otra megasequía registrada a finales del siglo XV, previamente considerada como la más intensa en los 1.200 años, revela el estudio publicado este lunes en la revista Nature Climate Change.
Es muy probable que las condiciones de sequedad persistan en la zona, por lo que, tendrán que pasar varios años húmedos para remediar las consecuencias de la "megasequía" del siglo XXI, afirma Williams.
Desde el año 2000, el déficit medio de la humedad del suelo ha sido dos veces mayor en comparación con las cifras de cualquier otra sequía durante el siglo XX. Los investigadores detallan que, en el periodo de 2000 a 2021, las temperaturas en la región fueron 0,91 grados Celsius más altas que el promedio entre los años 1950 y 1999.
Los estudios climatológicos demuestran que la actual sequía norteamericana habría sido rigurosa incluso sin el calentamiento global, aunque en menor medida. El cambio climático fue responsable de cerca del 42 % del déficit de humedad del suelo desde el año 2000, calcularon los científicos.
Williams afirma que las iniciativas gubernamentales existentes para resolver el problema de la escasez hídrica ayudarán solo a corto plazo, por lo tanto, es necesario implementar medidas de conservación del agua que garanticen que la gente disponga de las cantidades de agua necesarias a medida que el cambio climático intensifique la sequía.