El expresidente de Honduras Juan Orlando Hernández dijo este martes que está "presto y listo para colaborar", luego del pedido de extradición que hizo EE.UU., país donde ha sido implicado en presuntos nexos con el narcotráfico.
El exmandatario envió un mensaje de audio, a través de su cuenta en Twitter, en el que señala que está dispuesto a acudir con el acompañamiento de la Policía Nacional ante el "juez natural" que designe la Corte Suprema de Justicia (CSJ) para llevar su caso por la solicitud que hizo EE.UU., para "poder enfrentar esta situación" y defenderse.
"No es un momento fácil, a nadie se lo deseo", dijo el expresidente, quien saludó a todos los que lo han acompañado "con sus oraciones" y "con sus buenos deseos".
Hernández también dijo que ya informó, a través de sus apoderados, a la Policía Nacional sobre este trámite ante la Justicia hondureña.
El nombramiento del juez natural está previsto para esta martes, cuando se realice un pleno de magistrados. Esa reunión se convocó luego que la Cancillería del país centroamericano le remitiera a la CSJ una comunicación oficial de la Embajada de los EE.UU., en la que se solicita el arresto formal de Hernández con el propósito de que sea extraditado a territorio estadounidense.
El secretario de Seguridad de Honduras, Ramón Sabillón, confirmó, en declaraciones a la prensa, que actualmente Hernández se encuentra en su residencia, ubicada en la colonia San Ignacio, en Tegucigalpa, donde hay un fuerte cordón de funcionarios de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas.
El funcionario señaló que hasta el momento no existe una orden de captura en contra del exmandatario.
Las acusaciones
Fiscales de Nueva York han implicado a Hernández en presuntos nexos con el narcotráfico. De acuerdo con Sabillón, se le imputan cuatro delitos, entre ellos, "introducción de droga y armas a EE.UU." y "asociación para delinquir".
En marzo de 2021, su hermano, el exdiputado Juan Antonio Hernández, fue condenado a cadena perpetua en EE.UU. por delitos de narcotráfico.
La semana pasada, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, dijo que el exmandatario fue incluido el 1 de julio de 2021 en el listado estadounidense de personas señaladas de corrupción o de socavar la democracia en El Salvador, Guatemala y Honduras.