Ucrania, en caso de adherirse a la OTAN, podría intentar "recuperar" Crimea por la fuerza, arrastrando a EE.UU. y sus aliados a un conflicto armado con Rusia, según se desprende del texto de la respuesta escrita de Moscú a EE.UU. sobre garantías de seguridad publicado este jueves por el Ministerio de Exteriores ruso.
Desde el organismo reiteraron que Rusia no planea invadir Ucrania, por lo que consideran los señalamientos de que Moscú es responsable de la "escalada" de la situación como "un intento de presionar y devaluar la propuesta de garantías de seguridad de Rusia".
En el documento se subraya que para la "desescalada" de la situación en torno a Ucrania se requiere adoptar un conjunto de medidas. Según Moscú, la OTAN debería:
- "obligar a Kiev a aplicar" los Acuerdos de Minsk
- dejar de "suministrar armas a Ucrania"
- "retirar a todos los asesores e instructores occidentales" del territorio de Ucrania
- renunciar a realizar "ejercicios conjuntos con las Fuerzas Armadas de Ucrania"
- sacar "los armamentos extranjeros entregados anteriormente a Kiev"
La parte estadounidense no dio "una respuesta constructiva"
La Cancillería rusa constató que la parte estadounidense no dio "una respuesta constructiva a los elementos básicos" propuestos por Rusia en su proyecto, que implican sobre todo las cuestiones de la no expansión de la OTAN, el no despliegue de fuerzas de ataque en territorio ucraniano y el retorno de la configuración del bloque militar a su estado de 1997, cuando se firmó el acta fundacional entre Rusia y la OTAN.
"El aumento de la actividad militar de EE.UU. y la OTAN directamente en las fronteras rusas es alarmante", denuncia el documento. Asimismo, Moscú señaló que si EE.UU. no está dispuesto a un acuerdo diplomático, "Rusia se verá obligada a responder, incluso con medidas de carácter técnico-militar".
Configuración de las fuerzas rusas y de la OTAN
Comentando el tema del despliegue de tropas rusas cerca de las fronteras ucranianas, los diplomáticos destacaron que Rusia desplaza sus Fuerzas Armadas dentro de su propio territorio, lo cual "no afecta y no puede afectar a los intereses fundamentales de EE.UU.", y recordaron que no hay fuerzas rusas en el territorio de Ucrania.
Al mismo tiempo, en la respuesta rusa se señala que EE.UU. y sus aliados, mientras tanto, "impulsaron su infraestructura militar hacia el este, desplegando contingentes en los territorios de los nuevos miembros" de la OTAN. Asimismo, Ministerio de Exteriores de Rusia pidió que se retiren "todas las fuerzas militares y el armamento de EE.UU. desplegados en Europa Central y Oriental, Europa sudoriental y el Báltico".
Principio de la indivisibilidad de la seguridad
Según la parte rusa, en la respuesta estadounidense no hay "confirmaciones" de que EE.UU. "esté plenamente comprometida a respetar" el principio de la indivisibilidad de la seguridad, que estipula que la libertad de elegir alianzas queda limitada por la necesidad de evitar que otros países fomenten su seguridad a costa de la seguridad de los demás.
Las declaraciones de Washington de que tiene en cuenta este principio contradicen su "reticiencia" a "renunciar a la contraproducente y desestabilizadora política de crear ventajas para sí mismos y sus aliados a expensas de los intereses de la seguridad de Rusia", señalaron desde la Cancillería.
Política de puertas abiertas de la OTAN
Moscú denunció que la política de puertas abiertas de la OTAN "apoyada" por EE.UU. "contradice los compromisos básicos asumidos en el marco de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa", en particular, el compromiso de "no reforzar la seguridad propia a costa de la seguridad de los demás".
Asimismo, el Ministerio de Exteriores ruso exhortó a Washington y la Alianza Atlántica a "retomar el cumplimiento de los compromisos internacionales en materia de paz y seguridad".
"Igualación de seguridad" en la esfera de armamentos
En el texto de la respuesta rusa se destaca que EE.UU. tiene un enfoque "unidireccional" de la limitación de los armamentos, que "prevé una orientación exclusivamente en las armas nucleares". Rusia, por su parte, aboga por "un enfoque integrado a cuestiones estratégicas" y propone elaborar conjuntamente una nueva "igualación de seguridad".
La Cancillería rusa destacó que existe un problema pendiente de "la presencia, en violación del Tratado de No Proliferación Nuclear, en el territorio de algunos Estados no poseedores de armas nucleares de armas nucleares estadounidenses capaces de atacar objetivos en el territorio ruso". Los diplomáticos expresaron que también es necesario resolver esta cuestión y, entre otras cosas, desmantelar "la infraestructura para el rápido despliegue de este tipo de armas en Europa".
Asimismo, el documento subraya que misiles de medio y de menor alcance, bombarderos pesados y buques de guerra de superficie y simulacros y maniobras militares deberían formar parte de esta "igualación de seguridad".
- Anteriormente esta jornada, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, explicó las razones para la publicación de la respuesta rusa. "Creemos que es absolutamente necesario que los miembros interesados de las sociedades civiles de nuestros países estén al tanto de lo que está ocurriendo y de qué posiciones defiende cada bando, porque de lo contrario, si esto se mantiene en secreto, como prefieren nuestros colegas de Washington y Bruselas, entonces la opinión pública se verá inundada por las mentiras y la propaganda descarada que ahora llenan los espacios informativos al describir lo que está pasando en Europa, en la frontera entre Rusia y Ucrania", aseveró.