Los mexicanos Sebastián Arrechedera y Yosu Arangüena hackearon las audioguías del Museo Etnográfico de Viena, en Austria, donde se exhibe el 'Penacho de Moctezuma', para pedir el regreso de esa pieza a México.
El 'Penacho de Moctezuma' es un tocado de plumas de quetzal que habría pertenecido a Moctezuma Xocoyotzin o Moctezuma II, líder del imperio mexica hasta 1520. El mandatario mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha pedido en reiteradas oportunidades el retorno de la pieza a su país, señalando que "los austríacos se han apoderado por completo" del objeto.
Pero mientras los esfuerzos del Gobierno siguen sin dar fruto, Arrechedera y Arangüena, un documentalista y un publicista, respectivamente, se ingeniaron otra estrategia para generar más presión en Austria, con la puesta en marcha de un plan llamado "Audioguías de la verdad".
El plan consistió en incluir varios de esos aparatos de guías de audio, parecidos a un teléfono, que ayudan a los visitantes a conocer la historia de las piezas del recinto, junto con los que tiene el propio museo, para contar la verdad que ellos quieren que se sepa: cómo terminó el 'Penacho de Moctezuma' en ese lugar.
¿Cómo se desarrolló el plan?
Al ingresar al museo, los visitantes tienen acceso a una audioguía para conocer más acerca de cada pieza, con un relato en diferentes idiomas.
"Como no podíamos robar las audioguías, porque ahí nos metíamos en un problema con la policía, metimos audioguías nuestras", cuenta Arangüena, en entrevista con el medio español El Confidencial, al que explicó que compraron el mismo modelo de estos aparatos que tiene el museo, grabaron la historia distinta sobre el 'Penacho de Moctezuma' y los introdujeron.
Según relataron, su estrategia fue entrar al museo, tomar una audioguía, dar una vuelta como el resto de los turistas, meterse a un baño, sacar su propio dispositivo y, al final del recorrido, entregar los dos.
"El primer día estábamos muertos de miedo, pero lo que nos dimos cuenta es que era muy simple meterlas. Las audioguías no las tienen contadas, las echan en un cubículo, recargan y las toman de nuevo los visitantes", señaló Arrechedera.
En total metieron unas 50 audioguías con la modificación. "Como hubiera sido sospechoso que cada día entráramos nosotros al museo, nos han ayudado a dar el cambiazo jóvenes de diversas nacionalidades que viven en Viena y que decidieron apoyarnos", dijeron los mexicanos al medio español.
¿Qué escuchan ahora los visitantes?
Quien tome una de las 50 audioguías que los mexicanos lograron meter en el museo escuchará casi las mismas historias que tienen las guías de audio del recinto, salvo cuando se planten frente al 'Penacho de Moctezuma', donde escuchan el audio modificado, que hace el reclamo histórico de México y está en inglés, alemán y español.
El audio que se escucha fue grabado por Xokonoschtletl Gómora, un descendiente de aztecas y el líder de la Asocación Civil Yankuik Anahuak, que lleva toda su vida luchando para que el penacho sea regresado.
"Hola, te doy la bienvenida a esta audioguía de la verdad. Una versión de la historia contada por los herederos de los que sufrimos la invasión europea. Mi nombre es Xokonoschtlet Gómora, soy un descendiente azteca, y he dedicado mi vida a que la sagrada corona de nuestro emperador Moctezuma vuelva a nuestra tierra. Hoy es 13 de agosto del año 2021, un día de luto para México porque se cumplen 500 años de la destrucción de Tenochticlán a manos del invasor español Hernán Cortés", dice al inicio el audio hackeado, que en total dura aproximadamente ocho minutos.
Entre otras cosas, también señala que la pieza "llegó a Viena como consecuencia del saqueo europeo del patrimonio histórico que se exhibe en varios museos de ese continente como Austria, Francia, España, Inglaterra y Alemania".
El audio detalla que el objeto "es una corona real preciosa, no un penacho. Significa poder espiritual. Es como la mitra del Papa".
Finalmente, el mensaje de Gómora termina diciendo que el Gobierno austriaco ha puesto excusas para no devolver la corona.
¿Qué ha dicho Austria?
En 2020, el gobierno de López Obrador pidió prestada la pieza a Austria para las actividades culturales que se conmemorarían en 2021, año en que se cumplieron 700 años de la fundación de México-Tenochtitlán; los 500 años de la invasión colonial española y el bicentenario de la Independencia.
Sin embargo, el museo austriaco rechazó el pedido, justificándose en la fragilidad de la pieza. Gerard van Bussel, curador de las colecciones de América del Norte y Central de la institución, dijo que el penacho, al estar formado por material orgánico, cualquier vibración "en el aire o la carretera lo destruiría".
Hasta ahora no se sabe con precisión cómo llegó la pieza a Europa. Una de las versiones más conocidas sostiene que fue un regalo que hizo Moctezuma a Hernán Cortés, el conquistador que invadió Tenochtitlán. Luego, el español se lo habría enviado al rey Carlos I de España, quien era miembro de la familia Habsburgo, de origen austriaco, lo que es considerado como un factor para que se quedara en ese país.
Otra de las cuestiones en torno a la pieza es que no existe evidencia de que el gobernante Moctezuma II utilizara una prenda así, por lo que algunos investigadores creen que en realidad perteneció a un sacerdote azteca.