El Consejo de Seguridad Nacional de Ucrania ha aprobado este miércoles imponer el estado de emergencia en todo el país, salvo en las regiones de Donetsk y Lugansk, donde ya funciona un régimen jurídico especial, ha anunciado el secretario del organismo, Alexéi Danílov.
Según detalló el funcionario, la medida supone "el fortalecimiento de la protección del orden civil y de las instalaciones necesarias para asegurar la actividad vital de la población y la economía nacional. Se puede tratar de restricciones en el movimiento de vehículos, controles adicionales de transporte, verificación de ciertos documentos de individuos".
La severidad de las restricciones dependerá de regiones específicas y se definirá en cada caso por las "comisiones regionales, que incluirán a todos los representantes de las autoridades estatales o locales", precisó Danílov.
La decisión todavía no ha entrado en vigor y debe ser votada por el Parlamento. Previamente hoy, uno de los diputados, Serguéi Zhelezniak, informó en su canal de Telegram que la medida se discutirá "con gran probabilidad" a las 12:30 (hora de Kiev).
El anuncio llega dos días después que el presidente ruso, Vladímir Putin, anunciara su decisión de reconocer la independencia de las Repúblicas Populares de Donetsk y Lugansk, tras lo cual se firmaron acuerdos de amistad, cooperación y asistencia mutua entre Rusia y ambas repúblicas.
El martes, Putin confirmó que utilizaría las Fuerzas Armadas de Rusia si fuera necesario para defender las repúblicas de Donetsk y Lugansk. "Firmamos acuerdos, y en esos pactos, tanto con la RPD como con la RPL, hay cláusulas que dicen que proporcionaremos a estas repúblicas asistencia adecuada, incluida la militar. Dado que allí hay un conflicto, dejamos claro con esta decisión que, si es necesario, tenemos la intención de cumplir con nuestras obligaciones", dijo.
De acuerdo con la ley de Ucrania, el estado de emergencia puede incluir medidas como la prohibición de reuniones, manifestaciones y huelgas, así como eventos masivos como espectáculos y deportes. Asimismo, puede resultar en toque de queda, suspensión (tras una advertencia) de ciertos partidos o movimientos políticos e introducción de la censura, recoge el portal ucraniano Apostrophe.