La Unión Europea acordó este viernes imponer sanciones contra 98 ciudadanos rusos, entre ellos el presidente Vladímir Putin y el canciller Serguéi Lavrov, a causa de la operación militar de Rusia en Ucrania.
Asimismo, las sanciones fueron impuestas contra el primer ministro, Mijaíl Mishustin, el vicepresidente del Consejo de Seguridad ruso, Dmitri Medvédev, y el ministro del Interior, Vladímir Kolokóltsev, entre otras personas.
El paquete de medidas contempla la restricción de acceso del Gobierno ruso y del Banco Central al mercado de capitales del organismo, la prohibición de exportar tecnologías para la industria petrolera a Rusia como la exportación de bienes y tecnologías necesarios para las industrias aeronáutica y espacial.
Las restricciones también prohíben la provisión de fondos estatales o asistencia financiera para comerciar con Rusia e invertir en el país.
Previamente, el alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell, confirmó que Putin y Lavrov serán sancionados personalmente por el bloque comunitario. "El presidente Putin y el ministro Lavrov están en la lista de personas sancionadas junto con los restantes miembros de la Duma [Parlamento ruso] que apoyan esta agresión, y también con los miembros del Consejo de Seguridad de Rusia", señaló Borell, prometiendo también ampliar las sanciones a los bielorrusos que "apoyen la agresión rusa contra Ucrania".
Asimismo, el diplomático confirmó las medidas económicas anunciadas el jueves, como las sanciones contra el 70 % del sistema bancario del país euroasiático y "compañías estatales clave, incluidas del campo de la defensa". Las medidas "incrementarán los costos de los préstamos de Rusia, […] aumentando la inflación y erosionando gradualmente la base industrial de Rusia", pronosticó.
Una decisión similar de imponer sanciones contra Vladímir Putin y otros altos cargos rusos fue también anunciada por EE.UU., Canadá y el Reino Unido.