La multinacional cervecera Carlsberg ha decidido suspender las nuevas inversiones en Rusia y dejar de exportar los productos de otras empresas asociadas a sus fábricas de la marca Baltika en el país. El grupo también comunicó que va a estar pendiente de todas las sanciones impuestas contra Moscú y seguir el desarrollo de la situación.
Al mismo tiempo, la compañía donará cerca de 10 millones de euros para ayudar a los ucranianos.