El presidente ucraniano Vladímir Zelenski condenó a la OTAN por la falta de acción para proteger a la población ucraniana.
"La muerte de todas las personas fallecidas, a partir de hoy, será también su culpa", declaró el mandatario.
En su discurso la tarde de este viernes, el jefe del Estado ucraniano se centró en los países de la OTAN, por parte de los cuales el Gobierno esperaba acciones decisivas y una ayuda efectiva.
"Hoy se celebró la cumbre de la OTAN, […] que demuestra que no todos consideran que la lucha por la libertad en Europa sea el objetivo número uno", aseveró el líder ucraniano. Zelenski considera que todo lo que la Alianza ha podido hacer hasta el día de hoy es "facilitar a Ucrania 50 toneladas de gasóleo".
Las declaraciones del presidente tienen lugar tras la negativa de la Alianza Atlántica a establecer una zona de exclusión aérea en Ucrania. Con esta decisión, según Zelenski, el organismo dio "luz verde para bombardear ciudades y pueblos ucranianos".
"No sé a quién pueden proteger ustedes y si, de hecho, son capaces de proteger a sus países, los países de la Alianza Atlántica", manifestó el presidente dirigiéndose a la OTAN. "No podrán quitarnos de encima con sus litros de combustible [con los que pretenden pagar] litros de nuestra sangre derramada por nuestra Europa común, por nuestra libertad común, por nuestro futuro común", declaró Zelenski.
El ministro de Asuntos Exteriores del país, Dmitri Kuleba, a su vez, declaró que la OTAN, a diferencia de la Unión Europea, no puede tomar ninguna decisión a favor de Ucrania, y que tendrá que pagar por esta debilidad.
"El pueblo ucraniano pensaba que la OTAN era una fuerza y la Unión Europea era débil e indecisa", aseveró el alto diplomático en su entrevista con un canal de televisión local. "El pueblo ucraniano vio que era todo lo contrario: que la UE sí tiene carácter, sí tiene fuerza, que impuso sanciones sin precedentes... y la OTAN no puede hacer nada y lo delegó todo a los aliados", condenó Kuleba las acciones de la organización intergubernamental. "Se trata de una debilidad por la que, desgraciadamente, la Alianza pagará", concluyó el ministro ucraniano.