El Parlamento de Ecuador concede amnistía a 268 personas, incluyendo a procesados por las protestas de 2019 contra el Gobierno de Lenín Moreno

La madrugada de este jueves, tras una extensa sesión, la Asamblea Nacional (Parlamento) de Ecuador concedió la amnistía a 268 personas.

La medida recibió 99 votos a favor, 16 en contra y 10 abstenciones, luego de conocer las fichas ejecutivas individuales de los solicitantes, la base normativa internacional del sistema universal de derechos humanos, el marco constitucional, legal y reglamentario, así como la competencia del Legislativo para otorgar amnistías.

Esta amnistía beneficia a 60 personas que fueron judicializados "por ejercer el derecho a la resistencia y protesta social" durante las manifestaciones de octubre 2019 en contra del Gobierno de Lenín Moreno, a 153 "defensores de los territorios comunitarios", a 12 por ejercer la "administración de justicia indígena" y a 43 "defensores de la naturaleza".

La medida implica que los procesos contra estas personas deben detenerse. Los ciudadanos que ya fueron judicializados, sus casos serán extinguidos por resolución del juez; y aquellos que están en investigaciones previas, que son la mayoría, ya no podrán ejercerse acciones penales.

"Me siento muy contenta de que nuestros compañeros, los luchadores populares, defensores de los derechos humanos, del agua y la naturaleza y todas sus familias hoy recuperan su libertad, la justicia en el país y la tan ansiada reconciliación y unidad nacional", dijo la presidenta del Parlamento, Guadalupe Llori Abarca.

Persecución política

Entre los beneficiados con la medida están la prefecta de la provincia de Pichincha, Paola Pabón; el parlamentario andino Virgilio Hernández y el activista Christian González, todos opositores a la administración de Moreno y miembros del movimiento Revolución Ciudadana, que ahora forma parte de Unión por la Esperanza (UNES).

Estas tres personas estaban siendo procesadas por el delito de "rebelión" durante las protestas antigubernamentales de 2019.

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Pabón, quien sigue ejerciendo sus funciones de prefecta, pero hasta ahora porta un grillete que se le colocó en diciembre de 2019, agradeció a la Asamblea Nacional por la amnistía y con ello "poner fin a una práctica nefasta como es la persecución política a través del uso de la justicia".

"Esta decisión de la Asamblea Nacional es apenas un símbolo de unidad nacional frente a lo que fue el peor gobierno de la historia", señaló, por su parte, Hernández, haciendo referencia a la administración de Moreno.

Asimismo, fueron amnistiados el actual presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE), Leonidas Iza, y su antecesor, Jaime Vargas, quienes también tenían procesos abiertos por ese estallido social de 2019, acusados de secuestro a policías, terrorismo, odio e instigación.

Iza manifestó que estas amnistías son un "logro" que impulsaron desde la CONAIE, junto a diversas organizaciones sociales.

"Con esto se reivindica la lucha social, el derecho a la resistencia y la democracia. La lucha contra el neoliberalismo continúa", enfatizó el líder indígena.