El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, respondió este viernes a las polémicas declaraciones realizadas el jueves por el jefe del Comando Norte de EE.UU., Glen VanHerck, sobre la supuesta presencia de "espías rusos" en el país latinoamericano.
"Hay que mandarles telegramas avisándoles que México no es colonia de ningún país extranjero", dijo el mandatario en su acostumbrada conferencia matutina, en la que descartó que su Gobierno estuviera al tanto de las presuntas operaciones de Rusia.
Por otra parte, insistió en que su país es "libre, independiente y soberano", por lo que no admitiría este tipo de acciones en su territorio. "No somos colonia de Rusia, ni de China, ni de EE.UU.", zanjó.
La polémica surgió tras las declaraciones de VanHerck ante un comité del Senado estadounidense. Según el general, en México estaría "la porción más grande" del GRU (Departamento Central de Inteligencia de Rusia) en el mundo.
"Estos son personal de Inteligencia ruso. Y vigilan muy de cerca sus opciones para influir en oportunidades y acceso en EE.UU.", aseveró el militar, cuestionado sobre la "influencia rusa" en la región, durante una audiencia en el Comité de Servicios Armados del Senado.
Este viernes, López Obrador indicó que su Gobierno "no iba a cuestionar nada" de lo dicho por el jefe del Comando Norte porque en su país hay respeto "a la libre manifestación de las ideas", pero reiteró que dentro de su Administración "no tienen información sobre eso".
Del mismo modo, aclaró que si bien México "no le impide a ningún extranjero" llevar a cabo actividades legales en el país, sí detiene "a los que son delincuentes y cometen delitos".