Los países del G7 han acordado que no pagarán en rublos por el suministro del gas ruso, según lo ha comunicado el vicecanciller y ministro de Economía de Alemania, Robert Habeck.
El funcionario manifestó que "todos los ministros del G7 estuvieron completamente de acuerdo en que esto [el pago en rublos] sería un incumplimiento unilateral y claro de los contratos existentes".
Además, Habeck dijo que "el pago en rublos no es aceptable" y que se instará a las empresas afectadas "a que no sigan la demanda" de Moscú.
Al ser preguntado sobre un posible cierre del suministro de gas por parte de Rusia, Robert Habeck dijo que la UE está preparada para todos los escenarios.
Por su parte, el canciller de Alemania, Olaf Scholz, manifestó que en la mayoría de los contratos firmados por los importadores alemanes de gas ruso se estipula que el pago debe realizarse en euros, por lo que las operaciones se ejecutarán según lo acordado previamente.
Rusia "no va a suministrar gas gratis"
Pocas horas antes, el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, dijo que si la Unión Europea se niega a efectuar los pagos en rublos, Rusia "no va a suministrarlo gratis".
Todas las "modalidades" de pago en rublos para el suministro de gas natural a Europa "están siendo elaboradas" y luego se determinará el plazo fijo para esta forma de pago, detalló Peskov.
Entretanto, el ministro de Energía de Ucrania, German Galushchenko, anunció que Kiev no aceptará el pago en rublos por el tránsito de gas ruso hacia la Unión Europea. "No nos pasaremos al rublo. Es imposible. Es difícil. No es un acuerdo bilateral. Primero, los europeos tendrían que pagar en rublos. Todo está conectado", dijo Galushchenko.
"Decisiones ilegítimas" de Occidente
Tras las "decisiones ilegítimas" adoptadas por varias naciones occidentales de congelar los activos rusos, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ordenó la semana pasada aceptar el pago del suministro de gas natural a los "países no amigos" solo en rublos.
"Occidente ha trazado realmente una línea bajo la credibilidad de sus monedas, borrando la confianza en ellas", lamentó Putin. "No tiene sentido suministrar nuestros productos a la UE y a Estados Unidos y cobrar en dólares y euros", declaró. Asimismo, aseguró que Moscú seguirá suministrando gas a otros Estados de acuerdo con los volúmenes y precios estipulados en contratos anteriores.