El Gobierno de Brasil informó la noche del martes que el nuevo presidente de la estatal Petrobras será Adriano Pires, lo que implica la salida de la presidencia de la compañía del general Joaquim Silva e Luna, en medio de presiones y críticas por los sucesivos aumentos del precio del combustible.
En un comunicado, el Ministerio de Energía y Minas informó que la unión de accionistas mayoritarios de la estatal propuso al economista Adriano Pires para la presidencia. La decisión deberá ser confirmada el próximo 13 de abril en una reunión.
El presidente entrante de Petrobras asesoraba de manera informal a la cartera de Minas y Energía sobre el tema del precio del combustible. Según su propuesta, debería crearse una política de subsidio proveniente del Tesoro tanto para el diésel como para el gas en bombona, por un lapso de máximo seis meses, con la finalidad de paliar los efectos del conflicto entre Rusia y Ucrania, según Globo.
A mediados de marzo, Petrobras anunció en un comunicado un nuevo aumento, tras 57 días sin modificaciones de precios, como producto de las crisis por el covid-19 y "la tensión geopolítica en Europa". Así, la gasolina y el diésel sufrieron un incremento de 25 %, por lo que el litro de combustible se ubicó en 1,4 dólares, aproximadamente.
Años de alza de combustible
Silva e Luna, que deberá reunirse con el mandatario brasileño Jair Bolsonaro este martes, se mantendrá en el cargo hasta que se lleve a cabo la asamblea de accionistas de Petrobras. El también exministro de Defensa había cumplido casi un año al frente de la compañía estatal.
Su gestión, que debía concluir en 2023, fue fuertemente criticada por el Congreso brasileño y por el mandatario, que había dicho que si tuviera que dar un "puñetazo a la mesa" para resolver la situación del aumento de los precios, lo haría. Sin embargo, su salida ocurrió por las mismas razones de las de su antecesor, el economista Roberto Castello Branco.
Bolsonaro, quien ya había asomado la posibilidad de un cambio de titular de la estatal petrolera, también había manifestado que Petrobras "no colabora con nada" y aseguró que si fuera por él "podría ser privatizada hoy".
Desde 2016, durante el gobierno interino del derechista Michel Temer, la compañía adoptó la política de Paridad internacional de Precios (PPI) para la gasolina y diésel en las refinerías, lo que ha traído un impacto negativo para la economía y los sectores más vulnerables, según el senador del Partido de los Trabajadores (PT), Rogério Carvalho.
El año pasado, el senador del PT presentó un proyecto que propone un cambio en la forma de establecer los precios del combustible para "proteger los intereses de consumidor y reducir los cambios constantes de precios internos", según recoge Varejo.
En medio de esta situación, y tras el anuncio de aumento de Petrobras, la Cámara Baja aprobó un proyecto de reducción de impuestos federales para la gasolina, el diésel, el etanol y el gas doméstico hasta diciembre. Se espera que la propuesta sea aprobada por el Ejecutivo.