Lula se convierte en blanco de críticas de bolsonaristas y evangélicos al defender el derecho al aborto en Brasil

El expresidente Luiz Inácio Lula da Silva defendió el derecho al aborto en Brasil por ser una "cuestión de salud pública", y su comentario provocó la indignación del sector evangélico y de los seguidores del ultraderechista Jair Bolsonaro. 

"Aquí en Brasil, las mujeres pobres mueren intentando abortar porque está prohibido. El aborto es ilegal", comentó el líder del Partido de los Trabajadores (PT) durante un evento en Sao Paulo.

En su pronunciamiento, Lula también criticó a la clase media brasileña que "presume de un nivel de vida que no se tiene en Europa, que no se tiene en muchos sitios".

"Aquí en América Latina, la llamada clase media tiene un nivel de vida mucho más alto de lo necesario", aseveró el exsindicalista, tras recordar que mientras muchas mujeres pobres fallecen al intentar poner fin a sus embarazos, las "madames pueden abortar en París" o "ir a Berlin a una clínica buena".

En una clara referencia a Bolsonaro, Lula afirmó que "la agenda de la familia, de los valores, está muy atrasada y es utilizada por un hombre que no tiene moral para eso".

Los comentarios del petista, que lidera todas las encuestas de las elecciones presidenciales de octubre, supusieron una oportunidad perfecta para que los bolsonaristas arremetiesen contra él.

Reacciones

Entre los primeros en hacerlo destacaron los hijos del mandatario ultraderechista. "Estatizar privatizadas, confiscar armas, reglamentar los medios, perturbar a parlamentarios y sus familias en sus casas y ahora defendiendo el aborto. Lula no está pensando en una elección en un país cristiano, que respeta la propiedad privada", aseguró el diputado federal Eduardo Bolsonaro.

Por su parte, el senador Flávio Bolsonaro dijo que un elector no puede ser cristiano y defender a una persona favorable la interrupción voluntaria del embarazo. "Lula defiende abiertamente el aborto y hasta dice que la agenda de la familia y los valores es una agenda atrasada. Para los cristianos, que están pensando en votar al bandido, les dejo aquí la reflexión: o eres cristiano o defiendes a los que están en favor del aborto, ¡los dos no pueden!", escribió.

Por su parte, Damares Alves, exministra evangélica de la Mujer y que en 2020 intentó parar el aborto de una niña de 10 años que había sido violada, afirmó que la agenda de Lula "siempre fue la cultura de la muerte". "En las próximas elecciones nuestras opciones serán: vida protegida desde la concepción o la muerte de niños inocentes", subrayó.

El diputado federal Guiga Peixoto escribió: "Lula está a favor del aborto y en contra de las armas. Es decir, está a favor del homicidio, excepto con armas".

También el exfiscal Deltan Dallagnol, quien fue el coordinador de la operación Lava Jato, se pronunció sobre la polémica: "Nadie tiene derecho a quitarle la vida a un bebé, dentro o fuera del vientre".

En una columna en Veja, el periodista Thomas Traumann asegura que "es difícil encontrar un político progresista que no defienda un cambio en la legislación [sobre el aborto], pero ninguno lo dice públicamente por miedo a las reacciones de electorado conservador". Traumann destacó que esta declaración abre "un nuevo foco entre su campaña y la de Bolsonaro".

La última encuesta del Instituto Ipespe publicadas este miércoles sitúa a Lula por delante en las encuestas con un 44 % de intención de votos, frente a un 30 % de Bolsonaro.