El portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, Ígor Konashénkov, denunció este sábado que "el régimen nacionalista de Kiev" prepara nuevas acciones deliberadas "para culpar a Rusia" del asesinato de civiles en la ciudad de Irpín, en la provincia de Kiev.
En ese contexto, destacó que los militares rusos abandonaron la urbe hace más de una semana.
El vocero afirmó que agentes del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU) planean trasladar desde la morgue de un hospital cadáveres de residentes civiles que murieron tras ataques de la artillería ucraniana, con el fin de dejarlos en el sótano de un edificio a las afueras de la ciudad.
Luego, una escenificación será organizada en un bosque, en cuyo marco, supuestamente, "será eliminado" un grupo de reconocimiento ruso que, según el escenario, llegará a Irpín para "asesinar a testigos de crímenes de guerra de Rusia". Como evidencias, serán presentados cadáveres de militares rusos que fueron torturados y asesinados por nacionalistas, dijo Konashénkov.
"Esta acción escenificada cínica [será] organizada para luego difundir videos mediante medios de comunicación occidentales", indicó.
Además, el portavoz del Ministerio de Defensa ruso proporcionó los siguientes datos sobre el operativo militar ruso en Ucrania:
- Misiles de alta precisión destruyeron durante la última noche un gran depósito de municiones de las FF.AA. de Ucrania, cerca de la ciudad de Novomoskovsk
- La aviación y las Tropas de Misiles de Rusia destruyeron 85 instalaciones militares ucranianas durante la última jornada
Desde el 24 de febrero, los militares rusos destruyeron 127 aviones, 98 helicópteros, 425 drones, 2.031 tanques y otros vehículos blindados, 228 lanzacohetes múltiples y 880 unidades de artillería de campaña y morteros