Estados Unidos pretende amenazar a los países latinoamericanos con restricciones secundarias en castigo por no sumarse a las sanciones contra Moscú, declaró este viernes el embajador ruso en Washington, Anatoli Antónov, respondiendo a la pregunta de un periodista.
"Se nota la creciente irritación en el Departamento de Estado de EE.UU. ante la postura independiente de las naciones latinoamericanas que se niegan a participar en una 'cruzada' sancionadora contra Rusia y que tienen su propia visión de la crisis ucraniana", dijo el alto diplomático, cuando se le pidió que comentara las declaraciones del subsecretario estadounidense de Estado para Occidente, Brian Nichols, que anunció que Washington espera que los países del hemisferio occidental se unan a las sanciones contra Moscú.
"El objetivo de estas declaraciones es sencillo: intimidar a sus aliados con amenazas de restricciones secundarias en castigo por no unirse a la campaña antirrusa", señaló el embajador. "Al mismo tiempo, a Washington no le preocupa el evidente daño causado al desarrollo económico de los países de la región, su seguridad alimentaria y estabilidad social", agregó.