Miles de camiones rusos y bielorrusos se acumularon en el este de la Unión Europea en un intento de cruzar la frontera antes de la fecha límite fijada para este sábado, recoge Financial Times.
El pasado 9 de abril entró en vigor la prohibición que la UE impuso a la entrada de los vehículos de carga registrados en Rusia y Bielorrusia. Al mismo tiempo, obligó a los camiones que se encontraban en su territorio a salir del suelo del bloque comunitario antes del 16 de abril.
Según las fuentes del sector de logística consultadas por FT, miles de camiones registrados en los dos países y atrapados en Polonia deben esperar entre tres y diez días para cruzar la frontera. De acuerdo con Jan Buczek, jefe de la Asociación de Transportistas Internacionales por Carretera de Polonia, la larga fila generada por los vehículos rusos y bielorrusos cerca del punto fronterizo en la localidad polaca de Koroszczyn —considerado la ruta principal hacia Moscú— alcanzó unos 80 kilómetros.
La mañana de este viernes, el tiempo de espera para cruzar la frontera en Koroszczyn fue de 33 horas, mientras que el punto fronterizo de Bobrowniki estimaba unas 56 horas de espera para los transportistas, según los datos de la Administración Nacional de Ingresos de Polonia.
De acuerdo con Aliaksandr Kuushynau, alto ejecutivo de la empresa de monitoreo GPS Gurtam, unos 1.000 vehículos de carga rusos y bielorrusos se encuentran actualmente en la UE y "no regresarán a Rusia en los próximos días".
"Debemos encontrar una solución favorable porque cualquier acción agresiva de Europa contra los camiones rusos y bielorrusos en la frontera de inmediato provocará represalias contra nuestros camiones que se encuentran de camino a o regresan de mercados como Mongolia, Kazajistán y Uzbekistán", advirtió Buczek.
Por su parte, Bielorrusia introdujo desde esta jornada una prohibición de entrada al país a través de la frontera aduanera de la Unión Económica Euroasiática para los vehículos registrados en la UE.