El fabricante de autos eléctricos Tesla obligará a los empleados de su planta de Shanghái (China) a dormir en el suelo de la fábrica tras el reinicio de la producción luego de un cierre de tres semanas por un brote de covid-19 en la ciudad, según informa Bloomberg.
De acuerdo a documentos internos recogidos por el medio, la empresa proporcionará a cada trabajador un saco de dormir y un colchón, debido a que no hay sectores especialmente diseñados para el descanso.
Asimismo, el personal contará con espacios asignados para duchas y entretenimiento, como también tres comidas diarias y una asignación de 400 yuanes (63 dólares) al día.
Los trabajadores de Tesla ya comenzaron a operar en este sistema laboral, denominado circuito cerrado, y se espera que se prolongue hasta el próximo 1 de mayo.
Previo a la interrupción de las actividades provocada por el confinamiento en Shanghái, los operarios de la compañía trabajaban en cuatro días y luego tenían dos días libres. En cambio, ahora se les está pidiendo que trabajen jornadas de 12 horas diarias, seis días seguidos con uno libre.
Para eludir las medidas de restricción de movimiento en los complejos residenciales de la ciudad decretadas por las autoridades para contener la propagación del coronavirus, la firma emitió un certificado especial para los operarios y organizó autobuses para llevarlos de vuelta a la planta.
Por otra parte, Tesla se enfrenta a varios problemas logísticos, pues necesita aumentar su producción de automóviles por día y, de acuerdo con el medio, únicamente cuenta con inventario para poco más de dos semanas, según su nuevo cronograma.