La hepatitis aguda grave de origen desconocido que fue detectada en niños del Reino Unido se propaga a otros cuatro países europeos y EE.UU.

Las características clínicas y epidemiológicas de los menores enfermos ha llevado a los expertos a considerar probable que estas hepatitis tengan un origen infeccioso y no toxicológico.

El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) informó este martes que al menos cinco países del continente, y Estados Unidos, han detectado casos de hepatitis aguda grave de origen desconocido en niños. El hallazgo se produce dos semanas después de que las autoridades sanitarias de Reino Unido notificaran el registro de una decena de casos de la afección en menores de 10 años previamente sanos.

En un comunicado, el ECDC confirmó que la enfermedad se ha extendido a Dinamarca, Irlanda, Países Bajos y España, aunque el Reino Unido sigue siendo la nación con el mayor número de casos hasta la fecha. "Además, se han notificado nueve casos de hepatitis aguda en niños de entre 1 y 6 años en el estado de Alabama (EE.UU.)", detalló el organismo.

Por el momento se desconoce la causa exacta de estas hepatitis. Sin embargo, las características clínicas y epidemiológicas de los pacientes ha llevado a expertos británicos a considerar probable que tengan un origen infeccioso y no un carácter toxicológico. Se descartó una exposición común a sustancias químicas, alimentos o bebidas sospechosas, así como cualquier relación con las vacunas contra el covid-19.

Los virus que habitualmente provocan hepatitis infecciosa no se observaron en los menores. Los científicos y médicos están considerando la posibilidad de que la causa esté asociada a un adenovirus. Los nueve niños de Alabama dieron positivo para esa familia de virus, por lo que se está explorando un vínculo con algún serotipo en particular, recoge la agencia AP.

La semana pasada, las autoridades británicas informaron de 74 casos de hepatitis aguda grave en menores de 10 años, registrados desde enero. De estos, 13 fueron descubiertos en Escocia y los otros 61 en Inglaterra, Gales e Irlanda del Norte. El síndrome clínico en los casos identificados en ese país se caracterizó por "enzimas hepáticas marcadamente elevadas, a menudo con ictericia, a veces precedida de síntomas gastrointestinales", explicó la OMS en un comunicado.

Algunos pequeños tuvieron que ser trasladados a unidades especializadas en hígado infantil, e incluso seis de ellos fueron sometidos a un trasplante de hígado. Aunque algunos también dieron positivo por SARS-CoV-2 y/o adenovirus, la OMS subrayó que era necesario realizar una caracterización genética de los virus para determinar cualquier posible relación entre los casos.