Tras la liberación completa de la planta siderúrgica Azovstal, situada en la ciudad de Mariúpol, un equipo de RT grabó uno de los túneles en el que los militares ucranianos y los integrantes del batallón neonazi Azov estuvieron parapetados durante semanas.
Moscú anunció este viernes que todos los militantes del batallón nacionalista Azov que se encontraban en la planta se rindieron. "Las instalaciones subterráneas de la planta, en las que se escondían los combatientes, quedaron bajo el control total de las Fuerzas Armadas rusas", declaró el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Ígor Konashénkov.
2.439 combatientes del Azov y militares ucranianos depusieron las armas y se rindieron esta semana.
Según el Ministerio de Defensa ruso, también se entregó el comandante de dicho batallón, que, "debido al odio de los residentes de Mariúpol y al deseo de la gente de masacrarlo por numerosas atrocidades, fue trasladado del territorio de la planta en un vehículo blindado especial". Además, se rindió Serguéi Volynski, apodado 'Volyna', comandante de la 36.ª brigada de marines de la Armada ucraniana, quien ha participado en el conflicto de Donbass desde el 2014.