Se ha descubierto una fosa común en territorio anteriormente controlado por las fuerzas ucranianas en Mariúpol, informa el servicio de prensa del Comité de Investigación de Rusia.
El organismo indagatorio comunicó que está recabando elementos de prueba para entablar casos criminales con relación al lúgubre hallazgo, que los testigos describen como los restos de centenares de personas.
"El Comité de Investigación de Rusia recogerá en causas penales los datos sobre el descubrimiento de una fosa común organizada por militares ucranianos en la ciudad de Mariúpol", reza la declaración.
El Comité dijo haber empezado investigaciones para determinar la identidad de los fallecidos y las causas y circunstancias de muerte, así como para identificar a los implicados.
El alcalde local, Konstantín Iváschenko, contó a RIA Novosti que la fosa común fue hallada en uno de los cementerios de la ciudad, territorio que, confirmó, estuvo controlado por nacionalistas ucranianos, como el regimiento Azov.
"Según declaraciones de residentes locales, llegaban autos a esta parte, en marzo, y los uniformados sacaban cuerpos para ponerlos en las trincheras previamente cavadas", afirmó Iváschenko.
La ciudad de Mariúpol quedó gravemente destrozada en los recientes combates –que enfrentaron por un lado a las tropas rusas y de la República Popular de Donetsk, y por el otro a las fuerzas ucranianas–, debido a que estas últimas utilizaron para fines militares la infraestructura civil y además impidieron la evacuación de los habitantes, a fin de dificultar los avances de la operación militar especial rusa.
La ciudad fue cercada el 2 de marzo. A mediados de abril las fuerzas ucranianas se retiraron, pero mantuvieron un bastión en predios de la siderúrgica Azovstal. Para el 20 de mayo, todos los restantes 2.439 combatientes ucranianos atrincherados en los refugios subterráneos de la planta depusieron sus armas y se rindieron.