El XXI encuentro de mandatarios de la ALBA-TCP en Cuba repudia "las exclusiones y trato discriminatorio" en la Cumbre de las Américas
Los jefes de Estado y de Gobierno reunidos en la XXI Cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), que se llevó a cabo en La Habana, Cuba, este viernes, repudiaron "las exclusiones y trato discriminatorio" en la Cumbre de las Américas, que se realizará en Los Ángeles, EE.UU., en junio próximo.
En su declaración final, leída por el secretario Ejecutivo de la ALBA-TCP, Sacha Llorenti, los presentes en la cita dejaron claro que la exclusión de algunos países de la región, como Cuba, Nicaragua y Venezuela, a ese encuentro, es "arbitraria, ideológica" y está "políticamente motivada".
"Esa decisión unilateral constituye un grave retroceso histórico en las relaciones hemisféricas que ofende a los pueblos latinoamericanos y caribeños", enfatizan en el documento.
Además, dicen que este tipo de reuniones excluyentes "no contribuyen a la solución de ninguno de los urgentes desafíos de la integración ni las amenazas regionales y globales".
Ante esa situación, los miembros de la ALBA-TCP —que son 10 naciones en total, incluyendo a las tres excluidas de la Cumbre de las Américas— respaldan el derecho de todos los países del continente "a ser invitados y participar en dicho evento en igualdad de condiciones".
En la declaración final, la ALBA-TCP apoyó y agradeció "la valiente y digna posición" asumida por gobiernos, actores sociales, organizaciones y pueblos de la región, que han rechazado de manera contundente y de diversas formas las exclusiones de la reunión de Los Ángeles.
Entre los mandatarios que han levantado su voz de protesta y han condicionado su asistencia a la Cumbre de las Américas a que se invite a todos, están el mexicano Andrés Manuel López Obrador y el boliviano Luis Arce.