Arqueólogos marítimos han descubierto frente a la costa sur del Reino Unido el timón del Invincible, un buque de guerra del siglo XVIII.
El timón, de 11 metros de largo y en muy buenas condiciones, fue descubierto durante una inspección de rutina del lugar del naufragio de la nave cerca de Portsmouth, a 60 metros de la popa del navío, informa BBC.
"El barco era muy maniobrable y el timón era fundamental para su diseño", comentó el hallazgo el arqueólogo marino Dan Pascoe.
En 1744, los franceses botaron el Invincible, un navío de línea de 74 cañones, que era una de las embarcaciones más potentes de su época. Sin embargo, no sirvió a Francia por mucho tiempo, ya que durante la Guerra de Sucesión de Austria (1740-1748) fue atacado por una flota británica mientras escoltaba a un convoy de barcos mercantes.
Para darle al convoy la oportunidad de escapar, la nave atacó a los barcos británicos y al final de una cruenta batalla la mayor parte de la tripulación del Invincible resultó muerta o herida, de manera que tuvo que rendirse.
Tras una reparación, el barco se puso en servicio de la Royal Navy. Pero tampoco sirvió mucho a la Armada real, puesto que en 1758, en el estrecho de Solent (que separa Gran Bretaña de la isla de Wight), encalló en un banco de arena y se hundió unos días después, esta vez sin víctimas humanas.
En 1979, un pescador descubrió el Invincible hundido cerca de Portsmouth, pero los trabajos a gran escala para preservar los restos de este barco no empezaron hasta hace unos pocos años.
El proyecto, denominado 'HMS Invincible 1744', lo llevan a cabo mancomunadamente Maritime Archaeology Sea Trust, el Museo Marítimo Nacional y científicos de la Universidad de Bournemouth, que desde el comienzo de su exploración en 2017 han podido recuperar del fondo marino varios cañones, herramientas y otros artefactos de la nave.