La oposición en Argentina procura hacer avanzar en el Congreso su proyecto de Boleta Única de Papel para la elección de cargos nacionales, una iniciativa que busca concentrar todas las candidaturas en una sola planilla que, una vez seleccionadas por el votante sus opciones, será depositada en una urna electoral.
La idea cuenta con el apoyo de un importante sector del parlamento, pero es rechazada de plano por el oficialismo. Sucede que, de aprobarse, rompería con una tradición proselitista del peronismo, que consiste en el reparto casa por casa de boletas con el nombre y el rostro de sus candidatos.
Si bien no es el único que acostumbra hacerlo, al aparato militante del justicialismo y sus aliados le permite tener mayor despliegue en todo el país que cualquier otra organización política, principalmente en las barriadas populares.
De aprobarse la normativa, modificaría en ese orden propagandístico el escenario de la campaña electoral para 2023, cuando se llevarán a cabo los comicios presidenciales y de cargos legislativos. A ello hay que añadir que la imagen del Gobierno no atraviesa su mejor momento, debido a las dificultades para resolver problemas económicos de impacto directo en el bolsillo de las familias, como la alta inflación.
En este panorama, diputados nacionales de diferentes bloques opositores, encabezados por Juntos por el Cambio (macrismo), pidieron para el próximo miércoles una sesión especial dedicada a tratar el proyecto. Para que sea aprobado en la Cámara baja se necesitan 129 votos, que la oposición alcanzaría sin problemas.
Los bloques que apoyan el proyecto ya lograron obtener un dictamen unificado en el plenario de comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Presupuesto. El escollo principal estaría en el Senado, donde el oficialismo cuenta con mayoría y mantiene el control de comisiones claves.
Para el macrismo, terminar con el sistema actual de boletas múltiples ayudaría a contrarrestar el "clientelismo político", ya que considera que con la entrega personalizada de boletas se insta a los ciudadanos a votar por un determinado candidato a cambio de alguna dádiva o plan social, aunque, aclara, "no es la solución definitiva".
"Las soluciones mágicas en la democracia no existen. No hará desaparecer el clientelismo político, que es tal vez el vicio más grande que tiene el sistema, porque transforma a los votantes en rehenes, pero disminuirá el peso de los aparatos partidarios", dijo la diputada macrista Silvia Lospenato al diario La Nación.
Y aprovechó la discusión parlamentaria para criticar la gestión del Frente de Todos. "Este instrumento de votación no va a resolver la inflación, ni las jubilaciones de miseria, ni solucionar la inseguridad, ni va a recuperar los días de escuela que se perdieron, pero va a asegurar a cada ciudadano que puede elegir con mayor libertad a quien crea que le puede resolver esos problemas", afirmó.
Por su parte, la diputada oficialista Paula Penacca dijo que el proyecto de Boleta Única parece "un show mediático", en vez de un debate que apunte a mejorar el sistema de votación vigente, que, consideró, no tiene "ningún problema", ya que "no hubo ninguna denuncia de fraude o falta de transparencia". Además, apuntó contra la oposición por querer "desestabilizar al gobierno" nacional.
"Parece más un debate para construir un show mediático que para encontrar un mejor sistema de votación para el país", cuestionó Penacca en una entrevista con El Destape radio. Y consideró que si ese sistema se implementa, será "muy difícil encontrar al candidato que querés votar",debido a la extensión que podrían tener las boletas ante una amplia oferta electoral.
La iniciativa también fue rechazada por el jefe del Gabinete Ejecutivo, Juan Manzur, quien manifestó el miércoles en una rueda de prensa que el Gobierno "no está de acuerdo" con el proyecto de Boleta Única "tal como está planteado" por la oposición en el Congreso.
Al ser consultado sobre la posibilidad de que el presidente vete la ley en caso de ser aprobada, el funcionario pidió "esperar" a ver cómo avanza el proceso legislativo y no hacer "futurología".
De momento, todo parece indicar que el sistema de Boleta Única de Papel se aplicará para las primarias PASO y las elecciones generales para elegir presidente, vicepresidente, senadores, diputados y legisladores del Mercosur, aunque en estas dos últimas categorías solo aparecerán nombres y fotos de los primeros cinco candidatos.