El video de la esposa de Julian Assange, publicado en mayo, sobre cómo Estados Unidos busca vengarse del fundador de WikiLeaks, ha sido visto más de un millón de veces en Twitter.
"A EE.UU. y al Reino Unido les gusta hablar de presos políticos en el extranjero pero han creado un preso político propio. En cada etapa, la ley ha sido abusada para victimizar a Julian: ha sido silenciado, ha sido desaparecido", afirma Stella Assange.
La cónyuge del activista australiano, abogada de derechos humanos, sostiene que su pareja se encuentra en prisión por denunciar los crímenes de guerra por parte del Gobierno estadounidense en Irak y Afganistán y el hecho de que "se ha normalizado e institucionalizado las torturas".
"Y este superpoder se ha vengado", subrayó Stella Assange.
La mujer critica la postura del Reino Unido por aprobar la orden de extradición de su marido al "país que conspiró para asesinarle", plan que involucró a más de 30 funcionarios de inteligencia, incluido personal de alto rango.
"Es increíble que un país conspire para asesinar a un periodista por lo que ha publicado. Es precisamente lo que el Gobierno británico critica si sucede en otros Estados", recuerda.
Stella recalcó que el Gobierno estadounidense "es el único que ha cometido crímenes en este caso", y que al procesar a Assange por hacer una cosa buena, "le niegan la existencia y la validez de lo que denunció".
EE.UU. no es miembro del Tribunal Criminal Internacional por lo que la única responsabilidad que existe para el país es la exposición a través de WikiLeaks, explicó. Por esta razón, "no están simplemente procesando a Julian sino que también están poniendo en prisión la memoria de la víctimas" de los crímenes de guerra cometidos por Washington.
En este sentido, señaló que Assange es perseguido bajo la Ley de Espionaje de 1917, que cuando se aprobó desencadenó preocupaciones entre juristas constitucionales de que su amplia redacción pudiera ser aprovechada para perseguir a la prensa.
La decisión de la Administración Trump de aplicar esta ley, según Stella, "es el ataque más grande a la Primera Enmienda", considerada el "estándar de oro a nivel mundial en materia de la libertad de la prensa".
De esta forma, instó al actual presidente estadounidense Joe Biden a rescindir el caso, de lo contrario —advierte— este "será usado por futuros gobiernos para silenciar la disidencia y silenciar la prensa".
Asimismo, se refirió a lo absurdo y peligroso del hecho que "significa que cualquier persona en cualquier lugar está sujeta a la Ley de Espionaje de Estados Unidos". Al respecto, recordó que el ciberactivista no es ciudadano de EE.UU., es australiano y trabajó como periodista en el Reino Unido. "No le debe lealtad al gobierno de EE.UU.", acentuó.
Sin embargo, Assange se enfrenta a 175 años tras las rejas por recibir información de una fuente y publicarla en WikiLeaks.
"Esto avanza la absurda noción de que un país puede limitar la libertad de prensa más allá de sus fronteras, que puede tomar represalias contra periodistas extranjeros en el extranjero", expresó.
Stella responsabilizó a los medios de comunicación por no cubrir apropiadamente lo que sucede y no permitir al público entender las posibles secuelas de este caso para todos los periodistas del mundo.
En el video, la mujer cuenta las condiciones carcelarias a las que Assange es sometido y cómo afectan su estado de salud, además de mostrar episodios de sus visitas a su esposo acompañada de sus dos hijos, de tres y cuatro años, el mayor nacido en 2017 cuando su padre estaba refugiado en la Embajada de Ecuador en Londres.
"El hecho de que ha sido privado de su familia sin ningún motivo, solo por el rencoroso y cruel sentido de venganza por parte de una superpotencia a la que expuso tiene que llegar a su fin. Nadie debe ser tratado de esta manera", aseguró Stella.
La pareja del fundador de WikiLeaks instó a la ciudadanía a apoyarla en su lucha contra la extradición de Julian Assange, escribir a sus legisladores y salir a protestar.