Dos sacerdotes jesuitas identificados como Joaquín César Mora Salazar, 81 años, y Javier Campos Morales, de 79, fueron asesinados dentro de una iglesia por hombres armados en la comunidad de Cerocahui, ubicada en la sierra de Chihuahua, al noroeste de México, y sus victimarios se llevaron los cuerpos del lugar.
A través de un comunicado, la Compañía de Jesús informó este martes que el asesinato de los dos religiosos se produjo ayer y denunció que estos hechos violentos "no son aislados". De hecho, destacan que este tipo de sucesos se registran en distintas regiones del país que se enfrentan a "condiciones de violencia y olvido que no han sido revertidas".
"Condenamos estos hechos violentos, exigimos justicia y la recuperación de los cuerpos de nuestros hermanos que fueron sustraídos del templo por personas armadas", reclamaron los jesuitas, quienes también demandaron "que de forma inmediata se adopten todas las medidas de protección para salvaguardar la vida" de otros religiosos y de los habitantes de Cerocahui.
"Todos los días hombres y mujeres son privados arbitrariamente de la vida, como hoy fueron asesinados nuestros hermanos. Los jesuitas de México no callaremos ante la realidad que lacera a toda la sociedad. Seguiremos presentes y trabajando por la misión de justicia, reconciliación y paz, a través de nuestras obras pastorales, educativas y sociales", agregó la institución religiosa.
Las autoridades investigan
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, adelantó que se manejaba la hipótesis de que los sacerdotes habría sido asesinados cuando una persona perseguida por los sujetos armados entró al templo religioso, al parecer, para tratar de refugiarse de los atacantes.
"Entraron a la iglesia persiguiendo a una persona, lo asesinaron, salieron los sacerdotes y al parecer también ellos fueron asesinados. Estamos ahora atendiendo este asunto", dijo López Obrador durante su conferencia de prensa matutina.
El mandatario mexicano señaló que las autoridades manejan información "sobre los posibles responsables" del crimen y comentó que la sierra de Chihuahua es una zona con "bastante presencia de la delincuencia organizada".
¿Quiénes eran los jesuitas?
Los prelados eran integrantes de la Compañía de Jesús desde hace más de 50 años, según reporta el medio local Arístegui Noticias. Joaquín César Mora Salazar, conocido también como 'Morita', nació el 28 de agosto de 1941 en Monterrey, Nuevo León. Desde 1958 se integró a la comunidad jesuita y fue nombrado sacerdote en 1971.
En la década de los 70 fue misionero en la Sierra Tarahumara, adonde regresó a finales de los 90. Desde el 2000 trabajó como Vicario Parroquial en Chínipas, hasta 2006; y luego fue Vicario Cooperador en Cerocahui, Chihuahua, desde 2007 hasta la fecha.
Por su parte, Javier Campos Morales, conocido también como 'el Gallo', nació el 13 de febrero de 1943 en la Ciudad de México. Ingresó a la Compañía de Jesús el 14 de agosto de 1959 y en 1972 se ordenó como sacerdote.
Un año después empezó su misión como superior local, vicario pastoral y episcopal en la Sierra Tarahumara, en la comunidad de Norogachi. Fue párroco en varias localidades, en Guachochi entre 1974 y 1983; en Chinatú entre 1987 y 1999; y en Cerocahui desde 1996 hasta 2016.
Desde 2019 se desempañaba como Superior de la Misión Jesuita, Párroco, Vicario del Pastoral Indígena de la Diócesis de Tarahumara y Asesor Regional de las Comunidades Eclesiales de Base.