Netflix recortó su plantilla un 3 % al despedir a otros 300 empleados, lo que supone la última ola de despidos realizados por el gigante de 'streaming' estadounidense en medio de la desaceleración de crecimiento que ha experimentado la empresa este año.
De los que perdieron su trabajo, 216 personas proceden de Estados Unidos, 30 son de los países de Asia-Pacífico, 53 se encuentran en Europa, Oriente Medio y África, y 17 en América Latina, según la nota enviada este jueves a los trabajadores de la compañía, citada por The Hollywood Reporter.
La primera ola de recortes se produjo en mayo, casi un mes después de que Netflix reportara una pérdida de 200.000 suscriptores en el primer trimestre del año, con miras a que, para el segundo trimestre, otros dos millones de clientes podrían abandonar su suscripción.
"Sabemos que estas dos rondas de despidos han sido muy duras para todos, creando mucha ansiedad e incertidumbre", escribieron el director ejecutivo de Netflix, Reed Hastings, y el codirector ejecutivo de la plataforma, Ted Sarandos. "Tenemos previsto volver a un curso más normal de los negocios en el futuro", aseguraron los directivos.
Anteriormente, la compañía anunció que cobrarán una cuota adicional a los usuarios que compartan su cuenta (con personas que no vivan en su mismo hogar) e introducirán anuncios publicitarios mediante un nuevo plan de suscripción más económico que el actual, en un esfuerzo por aumentar sus ingresos y el número de clientes.