Autoridades estadounidenses concluyeron que los disparos que mataron a la periodista Shireen Abu Akleh, del canal catarí Al Jazeera, fueron efectuados "probablemente" desde posiciones israelíes, pero consideran que no fue intencional, según señaló este lunes el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, en un comunicado.
"La Oficina del Coordinador de Seguridad de EE.UU. para Israel y Palestina (USSC, por sus siglas en inglés) no encontró ninguna razón para creer que fuera intencional, sino más bien el resultado de circunstancias trágicas durante una operación militar dirigida por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) contra facciones de la Yihad Islámica Palestina", dice el texto.
El hallazgo es el resultado del análisis de las investigaciones de las FDI y de la Autoridad Palestina (AP), a las cuales el ente estadounidense "tuvo pleno acceso" en las últimas semanas.
La bala que alcanzó a la periodista fue entregada a un coordinador de seguridad del país norteamericano por las autoridades de Palestina para su análisis, tras el cual los especialistas "no pudieron llegar a una conclusión definitiva" sobre el origen del proyectil. "Los expertos en balística determinaron que la bala estaba muy dañada, lo que impidió llegar a una conclusión clara", indicó Price.
Reacción de Palestina
El informe del Departamento de Estado estadounidense provocó una airada reacción por parte de Palestina.
Akram al-Khatib, fiscal general palestino, afirmó que la conclusión de Washington de que la bala estaba "muy dañada" era incorrecta e insistió en que la periodista había sido atacada deliberadamente. "La declaración estadounidense de que no han encontrado razones que indiquen que el ataque fue deliberado es inaceptable", dijo al-Khatib, citado por Reuters. "Los palestinos seguirán emprendiendo acciones legales contra Israel en el Tribunal Penal Internacional", puntualizó.
Por su parte, el secretario del Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina, Hussein Al-Sheikh, responsabilizó a las tropas israelíes del asesinato de Abu Akleh y también indicó que continuarán los procedimientos en los tribunales internacionales. "No permitiremos que se intente ocultar la verdad o que se tengan tímidas referencias al señalar con el dedo acusador a Israel", escribió en su cuenta de Twitter.
Investigación de Israel
Entretanto, el Ejército israelí aseguró en un comunicado que continuará examinando la muerte de la periodista catarí, ya que el origen del disparo que provocó la muerte de Abu Akleh "no se pudo determinar en base de la información disponible".
Indicó que se realizó un examen balístico del proyectil y el arma con la que se disparó, pero "el estado físico de la bala y la calidad de las características de la misma no permiten que el examen balístico determine de forma concluyente si la bala fue disparada o no por el arma examinada".
Asimismo, las fuerzas israelíes destacaron que su investigación determinó "de manera concluyente que ningún soldado de las FDI disparó deliberadamente" contra la mujer.
Asesinato de Abu Akleh
La periodista palestina-estadounidense Shireen Abu Akleh murió baleada el 11 de mayo mientras cubría una redada israelí en un campo de refugiados en la ciudad de Yenín, en Cisjordania. Otro periodista palestino llamado Ali Samoudi, que trabaja para el periódico Quds —con sede en Jerusalén—, también recibió un disparo, en la espalda.
A fines de junio, expertos de la ONU concluyeron que la reportera fue asesinada por un disparo de las fuerzas israelíes.
"Toda la información que hemos obtenido —incluida la información oficial del Ejército israelí y del fiscal general palestino— es coherente con la conclusión de que los disparos que mataron a Abu Akleh e hirieron a su colega Ali Samoudi procedieron de las Fuerzas de Seguridad israelíes y no de disparos indiscriminados de palestinos armados, como afirmaron inicialmente las autoridades israelíes", comunicó la ONU en aquel momento.