Philip Breedlove, quien fue comandante supremo aliado en Europa de la OTAN entre 2013 y 2016, declaró en una reciente entrevista con The Times que Ucrania podría lanzar un ataque con los recién suministrados misiles Harpoon contra el puente del estrecho de Kerch, que une Crimea con la Rusia continental, lo que constituiría un golpe devastador para el Kremlin.
"El puente de Kerch es un objetivo legítimo", aseguró el excomandante, quien añade que esta estructura es "increíblemente importante" para los rusos.
"Ahora que Occidente le ha dado a Ucrania misiles Harpoon, creo que los rusos tienen todas las razones para estar preocupados de que Ucrania lance un ataque contra el puente", subrayó Breedlove.
Estas armas tienen un alcance máximo de unos 300 kilómetros y pueden ser disparadas tanto desde buques de superficie como desde aviones, aunque los lanzadores también pueden ser montados en tierra.
"Objetivo número uno" para Ucrania
A mediados de junio, antes de la entrega de los misiles Harpoon, el mayor general de las FF. AA. de Ucrania, Dmitri Márchenko, reveló que el puente de Kerch sería el principal objetivo militar una vez que recibieran las armas.
"Sí, es al 100%. No es ningún secreto ni para sus militares ni para los nuestros. Ni para sus civiles, ni para los nuestros. Este será el objetivo número uno a vencer", declaró Márchenko el mes pasado. "Es como si solo tuviéramos que cortar el intestino principal para suministrar reservas. Tan pronto como se corte este intestino, comenzarán a entrar en pánico", agregó.
En esa línea, el secretario del Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, Alexéi Danílov, afirmó en abril que las fuerzas de Kiev están dispuestas a realizar un ataque contra el puente. "Si hubiéramos tenido la oportunidad lo habríamos hecho. Si hay una oportunidad de hacerlo, definitivamente lo haremos", remarcó.